Actualmente en Colombia se generan alrededor 225 GWh/d día de los cuales el 20% proviene de plantas térmicas. Sin embargo, debido a las condiciones climáticas y otros factores, estas empresas han tenido que enfrentar grandes desafíos para asegurar la sostenibilidad. Alejandro Castañeda, Presidente de ANDEG expresó que entre los puntos clave para lograr una transición energética se encuentran: diversificar el portafolio energético, implementar nuevas tecnologías, actualizar la cadena de valor y colaborar con el sector público.
El presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (ANDEG) destacó que, a pesar de los grandes retos que ha enfrentado el sector, como los efectos negativos del “Fenómeno del Niño», las empresas térmicas estuvieron preparadas.
A diferencia de otros años, el suministro de combustible no decayó significativamente, por lo que la producción no se vio afectada en gran medida. “Tuvimos una fuerte disponibilidad de combustibles: carbón, gas natural y una pequeña cantidad de combustible líquido.
Ahora contamos con una planta de importación de gas, lo que evitó la falta de suministro ante la alta demanda de producción, especialmente cuando se incrementa debido a fenómenos naturales como El Niño”, comentó Castañeda. En el país, la energía consumida proviene en más del 70% de las hidroeléctricas, que dependen del agua en los embalses y se ven afectadas durante la temporada seca.
La energía térmica, producida a partir de combustibles fósiles, normalmente representa entre el 15% y el 20% de la matriz de generación. Por esta razón, las plantas térmicas deben operar con mayor capacidad para suplir parte de la generación hidroeléctrica.
Tecnología y diversificación
El Gobierno Nacional ha estado avanzando en la formulación de políticas para la transición energética, con el objetivo de modernizar el mercado eléctrico. Esto incluye diversificar el parque de generación, aumentando la participación de fuentes renovables no convencionales, actualizar la red eléctrica con tecnología de punta y fomentar una mayor participación de los consumidores en el mercado de electricidad.
En este contexto, Castañeda subraya que la generación térmica es esencial para integrar fuentes intermitentes como la solar y la eólica en el sistema eléctrico. “En el contexto colombiano, no es viable técnica ni económicamente contar con un sistema eléctrico compuesto en su totalidad por estas fuentes. En cambio, la generación térmica firme es necesaria para garantizar la confiabilidad, disponibilidad y estabilidad del servicio, asegurando calidad y continuidad”, afirmó.
El sector espera que, con la implementación de proyectos de expansión del Cargo por Confiabilidad y mayores niveles de contratación de energía en el mercado, el sistema eléctrico nacional logre consolidar una matriz de generación más diversificada, resiliente y confiable.
