Montería. Segundos después de haber quedado en libertad y cuando apenas se disponía a salir de prisión, el CTI recapturó al abogado monteriano Jaime Enor Agámez Pineda, investigado por el sonado caso del ‘carrusel’ de la educación en Córdoba.
Agámez, de 47 años, estaba privado de la libertad en el Establecimiento de Reclusión Especial (ERE) de Corozal, Sucre, luego de que, estando prófugo fue capturado el 25 de agosto de 2014, por la Policía de Carreteras, en un puesto de control en el kilómetro 12, Montería, cuando se movilizaba como parrillero en una moto, al regreso de unas peleas de gallo.
Una vez en la cárcel de Corozal, Pineda presentó un Habeas Corpus,por presunto vencimiento de términos que se resolvió a su favor, pero no contaba con que tenía otra orden judicial del Juzgado 71 Penal Municipal y la Fiscalía 5, que lo sindican de los delitos de Peculado Por Apropiación Agravado, Peculado por Acción y Falsedad en Documento Público Agravado.
La captura la efectuaron detectives del CTI de la Fiscalía en Sucre, en asocio con funcionarios de la Policía Judicial de Corozal.
Agámez es hermano del también abogado Eleodoro Agámez Pineda, quien junto a su hijo también profesional del derecho, Alfredo José Agámez, están prófugos de la justicia desde febrero de 2013, cuando, en un primer operativo de capturas ordenado y realizado desde Bogotá, quedaron libres porque no fueron presentados ante un juez de control de garantías, dentro de las 36 horas que reglamenta el Código de Procedimiento Penal.
El sonado ‘carrusel’ de la educación, que tiene en líos al abogado Agámez, empezó entre 2008 y 2009, cuando en Córdoba se expidieron 857 resoluciones sin el visto bueno de la Previsora para reconocer el ajuste a la pensión de jubilación a los maestros con 50 años de edad y 20 de servicio.
El desfalco al magisterio sumó 145 mil millones de pesos en dos etapas, la primera por 65 mil millones y la segunda por 80 mil.
