Al menos 300 familias que suman unas 1.500 personas están afectadas por las llamadas crecientes de monte en el municipio de Chimá, que proceden de jurisdicción de Ciénaga de Oro desde el fin de semana.
El reporte lo entregó el alcalde de Chimá, Juan Custode Vivanco, quien reportó que mientras tanto en otros sectores de la jurisdicción se sigue empleando el método artesanal de costales con tierra para contener el aumento de la ciénaga grande del Bajo Sinú, que borda a la localidad.
'Tenemos puntos críticos, sobre todo en el corregimiento Pimental, donde los niveles de la ciénaga ya superaron el camellón, pero hemos aguantado el agua con métodos artesanales porque no se puede trabajar con retroexcavadoras en estos momentos. Sin embargo, la creciente de varios arroyos en poblaciones de Boca de Catabre y Corozalito, donde están afectadas unas 300 familias', precisó el mandatario.
Custode dijo que la carretera que va desde su jurisdicción hasta Ciénaga de Oro, también empieza a afectarse con la inundación, mientras que unas 2 mil hectáreas de pasto están bajo el agua, para perjuicio de los pequeños y medianos ganaderos.
'Esa cantidad de hectáreas están bajo el agua, ya podremos imaginar lo que representa en pérdidas para los pequeños y medianos ganaderos', sostuvo el alcalde de Chimá.
Aumentan afectados en Lorica
Entre tanto la alcaldesa de Lorica, Nancy Jattin Corrales, confirmó que el censo de familias afectadas por el rebosamiento del río Sinú en su municipio aumentó a 6.480 (80 más del reporte que se mantenía) lo que representa unas 32.400 personas, especialmente en la zona rural que conforman los corregimientos de Mata de Caña, Nariño y Palo de Agua.
El aumento obedece a la ruptura de un nuevo boquete en el sector el Espinal, corregimiento Palo de Agua y según la mandataria ya se solicitó a través de un oficio a la Unidad Nacional de Atención y Prevención de Riesgo, que se abr la plataforma para incluir a los nuevos damnificados.
'Estamos continuamente enviando ayudas humanitarias, brigadas de salud y entrega de toldillos, además adelantamos la evaluación de las vías para la recuperación de las mismas y poder mitigar el impacto de esta ola invernal', explicó Jattin.
Corroboró la alcaldesa de Lorica que en su jurisdicción se han perdido por la inundación cerca de 3 mil hectáreas de distintos cultivos.
La emergencia invernal en Córdoba se presenta desde hace tres meses, producto de las fuertes lluvias en el Nudo del Paramillo, cuyas crecientes –pese al control que hace la hidroeléctrica Urrá en el embalse – pasan por las subregiones del medio y bajo Sinú, con poca capacidad de amortiguamiento en los humedales que han terminado en manos de particulares.
Las autoridades reportan más de 100 mil familias afectadas durante esta temporada invernal en este Departamento.