En un nuevo pronunciamiento la familia de Harold Suárez, una de las dos víctimas de fiscal Mario Lora Correa, pidió al fiscal general, Néstor Humberto Martínez, que separe al funcionario del cargo que ejerce en la unidad Antibacrim en Barranquilla.
'Hacemos un llamado al fiscal general, Néstor Humberto Martínez, porque precisamente ese organismo está aplicando una política anticorrupción, investigando a todos los funcionarios públicos, entonces es tiempo para que el fiscal Lora también sea separado del cargo, sentimos que no hay imparcialidad frente a nuestro proceso', sostuvo Hermes Suárez, hermano de Harold, una de las dos personas asesinadas y quien tenía solo 21 años.
El otro joven que murió a manos del fiscal Lora Correa fue Camilo Andrés Rodríguez, quien para la fecha del doble homicidio contaba con 33 años.
'No es justo que el homicida siga vinculado a la misma entidad que lo investiga, por eso sentimos que no existen garantías, además él puede tener acceso a todo el proceso e interferir en el mismo', sostuvo Suárez.
El fiscal Lora Correa disparó contra Harold Suárez y contra Camilo Andrés Rodríguez la noche del 18 de junio de 2016, al parecer en estado de embriaguez, en un establecimiento público de la calle 41, de Montería, donde departía con un hijo menor de edad. Rodríguez falleció el 3 de julio siguiente cuando era intervenido quirúrgicamente y Suárez murió el 26 de agosto en una clínica, producto de los balazos.
En el mismo hecho el fiscal le propinó un impacto de bala a un agente de la Policía Metropolitana que ya atendía la denuncia de un supuesto intento de atraco al hijo de Lora en el baño de la discoteca y que sería cometido por los dos jóvenes. Sin embargo, la Policía no les encontró arma, y tampoco tenían anotaciones judiciales.
El fiscal fue favorecido por un juez de control de garantías de Montería con medida de aseguramiento no privativa de la libertad, con la prohibición de visitar sitios de expendio de licor y portar armas.
La audiencia de acusación está programada para el próximo 29 y 30 de noviembre ante la juez penal del circuito de Lorica, Ana Verbel, después de la declaratoria de impedimento de tres jueces, dos de Montería y uno de Cereté, porque supuestamente mantiene una relación de amistad con el padre del acusado, el ex magistrado Jairo Lora Villa.
