En las 61 sedes educativas y 240 subsedes, incluyendo urbanas y rurales, que existen en Montería, no se utilizará más el pitillo plástico en las tiendas escolares, como mecanismo de protección al medio ambiente y cuyo pacto firmaron 50 rectores este jueves con la secretaría de educación de la ciudad.
La iniciativa, que se identifica con el eslogan ‘Yo Digo No al Pitillo Plástico, ¿y Tú?, fue planteada por el titular de ese despacho en la capital cordobesa, Ricardo Madera Simanca, en la segunda reunión con rectores que se realiza este año en la ciudad. Sin embargo, los diez rectores restantes, quienes estuvieron ausentes, no se han mostrado renuentes a este plan ecológico y harán lo propio en las próximas horas.
'Montería tiene una apuesta importante por ser la ciudad verde y sostenible de Colombia y en ese orden de ideas eso demanda de todos los ciudadanos y sectores una serie de compromisos y de acciones con responsabilidad ambiental. Desde el sector educativo estamos aportando para esto', indicó el secretario de educación, Ricardo Madera Simanca.
El proyecto es poyado además por la oficina de Ciudad Verde, en cabeza de su director, Andrés Felipe Lora, quien también invitó a los rectores a 'omitir el uso del pitillo plástico en las tiendas escolares del municipio'.
De acuerdo con estadísticas de la secretaría de educación de esta ciudad, con base en una muestra que se hizo en diez instituciones educativas, diariamente son distribuidos 3 mil pitillos lo que equivale a 66 mil mensuales y 539 mil arrojados al planeta en un año escolar.
'Adelantamos en Montería también proyectos transversales, fomentando comportamientos y conciencia desde los estudiantes, en cuanto al manejo de residuos, siembra de árboles, preservación de las fuentes hídricas, y demás temas ambientales que se llevan al aula y se fortalecen', explicó el secretario de educación de Montería.
Agregó que la campaña contra el uso del pitillo plástico será objeto de un seguimiento para seguir creando consciencia sobre el impacto negativo que tiene el uso de este para el planeta.
La rectora de la institución educativa San Anterito, en el corregimiento de ese mismo nombre, Tatiana Negrete, sostiene que le apuesta a la iniciativa por el impacto ambiental que genera.
'Es una acción sencilla y considero que con pequeños aportes se hacen grandes cambios', precisó Negrete.
A sus 750 estudiantes recomendó a corto plazo usar vasos plásticos y de pertenencia personal, mientras se acostumbrar a no pedir el pitillo plástico. Sugirió que esta iniciativa debería movilizar también a las empresas.