Un operario de la empresa Electricaribe fue atacado a golpes por un cliente cuando intentaba realizar labores de corte de energía a una vivienda morosa, en la carrera 9 con calle 26, del barrio El Prado, ubicado en el casco urbano del municipio de Cereté, área Metropolitana de Montería.
El funcionario resultó con una herida abierta en la cabeza producto de los golpes que le propinaron sus agresores quienes, utilizaron las mismas herramientas con las que trataba de realizar su trabajo en el citado sector.
El hecho de intolerancia ocurrió durante la mañana del Sábado de Gloria, pero la denuncia fue interpuesta ante la Fiscalía este Lunes de Pascua, 22 de abril. Según el informe presentado por la empresa Electricaribe, la denuncia fue radicada por los delitos de lesiones personales y constreñimiento ilegal.
Las autoridades se abstuvieron de revelar la identidad del cliente denunciado.
Se supo que el día de los hechos, el operario había llegado a la zona junto con otro compañero a realizar las labores, pero al notificar la labor que tendrían que realizar en la vivienda morosa, fueron recibidos con agresiones verbales.
Todo indica que a pesar de los insultos, los operarios continuaron su trabajo tratando de ignorar los ataques, pero esto enardeció aún más a los residentes, quienes les arrebataron las pinzas con las que trabajan y comenzaron a agredirlos con las mismas.
En la acción uno de los operarios resultó con una herida abierta en la cabeza, por lo que tuvo que ser trasladado a un centro médico donde le brindaron la atención pertinente.
Se supo que luego del altercado, los propietarios de la vivienda entraron en razón y permitieron que se procediera con la realización del corte de la energía tal como se había establecido por falta de pago del servicio.
Las directivas de la empresa rechazaron este tipo de agresión y le hicieron un llamado a la ciudadanía para que no se opongan al desarrollo de las actividades de los operarios que están amparadas bajo la ley.
Una vez instaurada la denuncia ante las autoridades competentes, se iniciaron las investigaciones de rigor para establecer responsabilidades e imponer sanciones por este hecho de intolerancia que se ha vuelto reiterativo en varias ciudades de la Costa Caribe.