Desde la casa de una sobrina en Lorica, donde pernocta tras sufrir una enfermedad respiratoria, se encuentra Julio Villareal Contreras, de 88 años, quien está atrapado por la pandemia en Lorica.
El anciano solía ganarse la vida vendiendo variedades por las capitales de la Costa Caribe, pero desde que inició la pandemia quedó con las manos atadas para poder trabajar y sostenerse.
Villareal Contreras había llegado a la casa de una sobrina en Lorica, quien lo ayudaba económicamente, pero en medio de la crisis la mujer se quedó sin empleo y ya no puede sostenerlo en el hogar.
Yarlidis Gómez Contreras, sobrina del adulto mayor, escribió a la línea Wasapea a EL HERALDO para requerir el apoyo de los hijos del anciano, pues ella se ha quedado sin empleo y no puede seguir cubriendo sus gastos de manutención.
La situación se complica particularmente en el caso de Julio Villareal Contreras, pues sus seres queridos en Córdoba solamente saben que durante su vida, el hombre engendró a tres hijos, pero nunca mantuvo una relación estable con ellos, por lo que actualmente no sabe cómo ubicarlos.
'Él tiene sus papeles en regla y también le hicieron la prueba del coronavirus, que le salió negativa. Siempre ha sido un rebuscador de la vida, pero ahora cayó enfermo y por no tener una familia a quién referenciar, se vino para acá, pero desafortunadamente por nuestra situación económica no podemos tenerlo', explica Gómez Contreras.
Yarlidis sostiene que sus familiares residen en el barrio Las América, de Barranquilla, y los identifica como Maribel Contreras, Ana Matilde y Alfredo Contreras Villareal.
En caso de tener alguna referencia puede llamar a la línea 3016887418.
