El defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, dijo desde el sur de Córdoba que irá 'a donde haya que ir' para escuchar a las víctimas y trabajar para hacer respetar sus derechos.
A propósito del Día Nacional de los Derechos Humanos, el funcionario visitó Puerto Libertador y San José de Uré, donde se solidarizó con los desplazados por los grupos armados.
En Uré se entrevistó a puerta cerrada con las 69 familias desplazadas por dos masacres en la vereda La Cabaña.
Durante el encuentro, realizado en el Colegio Beato Juan XXIII, en el casco urbano de Puerto Libertador, el defensor acompañó al gobernador de Córdoba, Orlando Benítez, a la firma de la ordenanza para implementar la política pública en defensa de los derechos humanos en el departamento.
Camargo Assis hizo un reconocimiento y exaltación a las labores por la defensa de los derechos humanos de los líderes sociales en el sur de Córdoba.
'Nuestros pueblos no pueden ser sometidos bajo ningún yugo, mucho menos el de la violencia, con el que esta tierra ha sido vilmente atacada y azotada por los violentos', aseguró el Defensor.
En Puerto Libertador se dirigieron al monumento 'el Árbol de las dos memorias', en homenaje a la paz, la verdad y la reconciliación.
En San José de Uré, tras un encuentro con las víctimas de desplazamiento que no han podido retornar a sus tierras, declaró: 'Imposible no conmoverse al escuchar historias de vida de cada víctima sobre las amenazas que originan desplazamiento y confinamiento de poblaciones vulnerables. Estamos comprometidos en garantizar sus derechos', declaró sobre las 279 desplazados de La Cabaña .
Dijo además que hay zonas del país que han sido históricamente azotadas por la violencia, y han hecho el gran desafío y reto de ser territorios de paz. 'Debemos seguir apostándole a que haya una paz estable y verdaderamente duradera', añadió.
El Defensor tuvo un espacio para citar algunas estrofas del himno de Córdoba. 'Precisamente en este día en el que se conmemoran los derechos humanos, quiero citar a San Pedro Claver y al Himno de Córdoba en esa parte que dice, ‘los pueblos que no luchan no tienen porvenir’, para que de igual manera luchemos por el cumplimiento de los derechos humanos'. Esta fue la primera visita oficial al territorio cordobés como Defensor del Pueblo.
'La violencia, las amenazas, las extorsiones, los homicidios, son una forma de esclavitud, de someter a nuestras poblaciones y comunidades con ese ejercicio arbitrario como lo es el sometimiento ante los padecimientos al que pueda someterse a la condición humana', puntualizó el alto funcionario.
Camargo aprovechó para pedirles a los miembros de los grupos al margen de la ley que operan en el sur de Córdoba, a que se sometan a la justicia, a la verdad, y ofrezcan garantías de no repetición.
Para las autoridades locales el hecho de que el nuevo Defensor del Pueblo sea oriundo de Córdoba es una ventaja por el conocimiento de los problemas de violencia que, en los últimos años, han azotado especialmente el sur del departamento.
