Compartir:

Las comunidades campesinas e indígenas Embera Katío del Alto Sinú de Tierralta, que se habían establecido en el parque principal Laureano Gómez de Montería, comenzaron este domingo el retorno a sus territorios después de 110 días de haber tenido que abandonar sus casas por culpa de la violencia.

El proceso fue acompañado por Carlos Camargo, Defensor del Pueblo, quien explicó que 'durante los próximos 3 meses un equipo interdisciplinario de la Defensoría se quedará con las comunidades en sus resguardos, como garante de que se respeten sus derechos'.

'Es un motivo de celebración personal e institucional poder acompañar de manera personal a las familias de las comunidades campesinas e indígenas Embera Katío del Alto Sinú de Tierralta', dijo el funcionario.

El Defensor del Pueblo destacó que 'este es un proceso en el que hemos participado desde el día uno, cuando las comunidades indígenas llegaron a Montería, y seguiremos haciéndolo porque la defensa, protección y promoción de los derechos humanos de nuestras comunidades indígenas y campesinas es una prioridad, así como lo es su retorno seguro, digno y voluntario'.

Finalmente, reiteró el agradecimiento a la Unidad para las Víctimas, a las alcaldías de Montería y Tierralta, a la Procuraduría y a la Gobernación de Córdoba por haber permitido la articulación para que este retorno, que continúa gradualmente durante los próximos días, hoy sea una realidad.

Durante los últimos meses, al menos 1.503 indígenas, de 210 familias, se establecieron en el parque principal Laureano Gómez de Montería. Mientras que 74 familias de las comunidades indígenas de Manzana, Tundo y Sabaleta y otras 15 familias de campesinos Jawe, en total 294 personas, se desplazaron y confinaron en territorio de la comunidad de Sabaleta.

Este lunes le tocará el turno a las familias del cabildo Camaenka y el martes al cabildo de Karagaby.