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La Gobernación de Córdoba a través del despacho de la gestora social, Valeria Vega, puso en marcha las Aulas Doradas Escolares (ADES), una experiencia de escolaridad en los centros asistenciales del sector oficial del departamento.

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Esta estrategia garantizará la continuidad escolar de niños, niñas y adolescentes con estancias hospitalarias prolongadas.

Es posible gracias a la alianza del gobierno cordobés con la Fundación IMAT, de hecho la inauguración se produjo en las instalaciones de la Clínica Imat Oncomedica Auna.

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De acuerdo con las necesidades de los pacientes-estudiantes el programa de Aulas Doradas Escolares funcionará en tres modalidades así:

  1. Estudiantes en tratamiento que no pueden salir de sus habitaciones.
  2. Estudiantes en tratamiento que pueden desplazarse dentro de la clínica a los espacios dispuestos para sus clases.
  3. Estudiantes que asisten a la clínica de forma itinerante para sus controles y regresan a sus hogares, pero aún no pueden volver al colegio.

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Valeria Vega, la gestora social de Córdoba, se mostró complacida al anunciarle a los niños y sus madres, padres y cuidadores, que Córdoba es uno de los primeros departamentos en la Costa Caribe que tendrá el programa Aulas Doradas Escolares. “Este programa apuesta por la innovación en la educación y, sobre todo, está diseñado atendiendo la individualidad física y emocional de cada uno de nuestros niños. Este programa es avalado y supervisado por la Secretaría de Educación Departamental, que será garante de que se cumpla con las condiciones requeridas”.

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Cada espacio de ADES está equipado con material pedagógico, tecnológico y personal docente capacitado para el desarrollo de actividades académicas en aulas hospitalarias. Cuarenta educadores de la Normal Superior de Montería y la Universidad de Córdoba serán los encargados de nutrir de nuevo el aprendizaje de estos estudiantes.

Por su parte, Viviana Gracia, directora de la fundación Imat, aseguró que con la realización de este proyecto, además de la garantía de los derechos de los niños, contribuirá a la salud mental de todos ellos, ya que tendrán una motivación más para seguir adelante en el difícil camino que afrontan.

“Hace ocho años he venido tocando puertas para que ADES fuera una realidad, y Valeria me dio un sí rotundo desde que escuchó mi propuesta, tan rotundo que en cuestión de meses ya estamos aquí inaugurando este sueño que será una recarga de esperanza cada día para nuestros pelones”.