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Alberto Montt le debe al internet la popularización de su trabajo como caricaturista, que a pesar de que viene en Dosis diarias, nombre de su blog desde el 2006, sus viñetas han caído gota a gota entre sus más de 100 mil seguidores en Twitter y Facebook en todo el mundo.

Nacido en Ecuador, pero de padres chilenos, Alberto se considera un habitante de Latinoamérica que interpreta con humor crítico sus profundas ambivalencias tanto en las relaciones personales, sociales, políticas y religiosas mediante sus ingeniosos personajes y caricaturas, que en un día pueden recibir 150 mil visitas en sus redes sociales.

Montt considera que su graduación como caricaturista fue cuando la prestigiosa editorial argentina de la Flor le ofreció publicar sus libros gráficos.

Al verse en el mismo catálogo editorial con figuras como Quino, Fontanarrosa, Liniers y Maitena fue 'un momento de locos', según describe.

Alberto Montt estará en Barranquilla, donde dice que quiere comerse una hamburguesa de El Corral, escuchar los boleros de Alci Acosta y participar de la programación del Carnaval de las Artes. Se presentará el jueves 13 de febrero, a las 2:30 p.m., en el teatro Amira de la Rosa, en la apertura de las exposiciones junto a Nitho Cecilio y Gustavo Tatis en conversación con Néstor Martínez Celis.

¿Cómo empezó su carrera de caricaturista?

En mi primera infancia vivía fuera de Quito y mi padre cuando iba al pueblo, porque mi padre era agricultor, me traía los libros que había y que pensaba que eran para niños, entre esos libros venía Condorito y me trajo mil cosas más desde Kalimán, revistas de superheroes, que nunca enganché mucho y lo que más me llamaba la atención era el humor gráfico, Olafo por ejemplo y Mafalda, sin duda fue de lo más importante que leí y allí comenzaron mis padres a inculcarme y no frenarme en el mundo de las gráfica y la caricatura.

¿Cómo nació el blog ‘Dosis diarias’?

Yo trabajé como ilustrador muchos años y lo que quería era un espacio para volver a dibujar para mí mismo sin la necesidad de tener un cliente y ese espacio terminó siendo un blog en donde iba poniendo ideas que se me iban ocurriendo. Yo nunca pensé que iban a ir por el camino de la caricatura y de hecho yo lo único que quería era reproducir las idioteces que tenía en la cabeza. Esto comenzó con la creación del blog a finales del 2006 y principios del 2007.

¿Cuál ha sido el riesgo más grande que ha corrido en su carrera?

Hubo dos saltos suicidas. El primero fue dedicarme al dibujo, porque yo estudié diseño y en un momento decidí que el diseño no era lo mío y lo que yo quería era dibujar y me quedaban 20 dólares en la billetera y los tomé para comprar revistas y llamé a las revistas a ofrecerme como ilustrador. El segundo suicidio fue una casualidad y empecé a hacer este blog para mí y comenzó a ganar seguidores y gente que lo veía y lo puse en internet como un espacio de libre edición, pero era para mí y los amigos. Nunca pensé que al blog iba a entrar alguien más aparte de mí y dos amigos y no fue un suicidio en sí mismo sino que estaba nadando y comenzó a aparecer un buque y yo no planificaba convertirme en el capitán de nada.

Admite que tiene limitaciones en el dibujo, pero a la vez eso se ha convertido en su mayor fortaleza...

La manera de figuración con la encaro a mis personajes son el conjunto de mis incapacidades repetidas una y otra vez, una y otra vez. Como yo no puedo dibujar pies, porque me es muy difícil, la mayoría de mis personajes aparecen de la cintura para arriba. Como no sé dónde comienza el cuello y dónde empieza la cabeza mis personajes son un solo bloque desde la coronilla hasta los hombros, que no existen y al ir repitiendo estas incapacidades se empiezan a generar lo que termina convirtiéndose en un estilo reconocible.

El amor siempre está presente en su obra ¿Qué opina de las relaciones actuales?

Uyyy ¿Tienes tiempo? Yo creo que toda mi obra gira en torno al amor y a la dualidad y el amor es uno de esos grandes ejemplos de la dualidad. Lo mismo que Dios y el diablo como el bien y mal. Aquí aplicamos siempre que lo que es bueno para ti es bueno para todo el mundo y eso lo aplicamos en la política, la religión hasta en los restaurantes y eso en algún momento de mi juventud me volvió loco, porque para mí todo venía armando en escala de grises y los temas que toco en las dosis son justo eso, poner evidencia y en ridículo esas situaciones en donde lo absoluto es lo absurdo.

¿Con quién se identifica más, con Dios o con el Diablo?

Por el Diablo, por supuesto. Si tengo que escoger un personaje de ficción por lo menos el Diablo tiene claro lo que quiere y Dios, al menos en Dios cristiano, es un misógino, megalómano, bipolar que no convence en lo absoluto.

¿Por qué odia a Ricardo Arjona?

Es muy loco, porque hay percepción como si yo fuese el enemigo número uno de Arjona. Sí me parece horrible y me da más pena la gente que lo escucha, que Arjona mismo. Había tanto comentario de que Alberto Montt odiaba a Ricardo Arjona que me puse a revisar el blog entero y hay solo tres o cuatro caricaturas de Arjona entre tres mil caricaturas y no es tanto y parece que calaron hondo en la idiosincrasia y la memoria de los internautas.