Un encuentro con mediadores y actividades lúdicas es la propuesta pedagógica del Museo de Arte Moderno de Barranquilla para los niños en diciembre. Después de abrir sus puertas en septiembre pasado tras el confinamiento nacional obligatorio, el recinto que cumple 24 años el próximo 6 de este mes, lanza un 'pequeño programa', pensado para llenar las expectativas del público infantil.
Los días 4 (hoy), 11 y 18 de diciembre, el grupo de Mediadores Mamb hará recorridos de 4:00 a 5:00 p.m. dirigidos a personas de 4 a 15 años y organizados por rango de edad, como lo especificó el Museo: viernes 4 de diciembre (de 11 a 15 años), 11 de diciembre (de 4 a 6 años) y 18 de diciembre (de 7 a 10 años).
Cada día, un grupo conformado por cuatro mediadores recibirá a ocho niños como máximo en el horario mencionado. El recorrido incluye actividades en el primer y segundo piso del Museo en torno a la muestra actual titulada Cinco leyendas. Un siglo, con obras de notables artistas nacionales, quienes en este 2020 cumplen o cumplieron 100 años de haber nacido: Enrique Grau, Nereo López, Edgar Negret, Alejandro Obregón y Cecilia Porras.
El coordinador del Área de Educación del Museo, Eduardo Rodríguez, dice que hasta el momento las actividades que plantearon de manera virtual fueron sólo para público adulto. 'Habitualmente tenemos programas para niños, pero en este caso no los pudimos llevar a cabo debido a la pandemia. Entonces, ya entrados en esta etapa de lo que se ha llamado la ‘nueva normalidad’, decidimos plantear estas visitas presenciales para niños, a cargo de los mediadores, un grupo de más de 20 personas que se ha formado de manera presencial y virtual', añade Rodríguez.
Los niños deberán asistir acompañados sólo de una persona adulta. El Museo se hará cargo de los materiales y en algunas actividades participarán también sus acompañantes. Habrá juegos con mapas, pistas, dibujos y acciones para que los niños y adolescentes se relacionen a través de la voz, los actos y la escucha con las obras.
Para el gusto de los visitantes
Karen Fontalvo, una de las mediadoras y quien recientemente culminó el último semestre de Licenciatura en Pedagogía Infantil, estará con el grupo de edad de 7 a 10 años. En diálogo con EL HERALDO destaca que los mediadores son de carácter 'multidisciplinario: hay artistas plásticos, licenciados en educación y literatura'.
Explica que las actividades planteadas para los próximos tres viernes son 'lúdico-pedagogicas' y su propósito es abarcar 'los gustos, intereses y necesidades de la población infantil, pre-adolescente y juvenil'. 'Buscamos que el infante o el joven sea un sujeto activo en el proceso de enseñanza y aprendizaje, que no se limite a escuchar una narración del mediador, sino que se involucre en ese proceso; todo ello a través de lo auditivo, lo visual y lo sinestésico para que el participante mire, escuche, actúe e interprete'.
Con las actividades, los mediadores aspiran a que el aprendizaje se 'interiorice' y se muestre el Museo como un 'espacio vivo, que va más allá de las palabras'. Fontalvo, también formada como mediadora en el Mapuka de la Universidad del Norte, añade que 'los museos no son aburridos, son un espacio para actuar, conocer y disfrutar'.
Durante las actividades los niños harán un juego de roles a través de máscaras para adivinar qué personajes se encuentran en las obras expuestas del Museo, 'de manera que estén atentos, encuentren el personaje, lo interpreten una vez que vean la obra y se tomen una foto de recuerdo'.
Sobre la importancia de realizar estos eventos en medio de la pandemia, Fontalvo dice que es necesario 'que los niños conozcan su historia, su idiosincrasia y cultura. A pesar de que no estén familiarizados o estén alejados de la cronología de estos artistas, es importante que desde edades tempranas sientan el arte como algo cercano y vean como normal acercarse al Museo'.
Adicionalmente, con esta apuesta y este calendario decembrino, el Museo quiere ofrecer un espacio que cuide 'la salud mental de los niños, para que no se concentren sólo en videojuegos o en ir a centros comerciales, sino que alimenten su mente con las obras artísticas que los rodean. El arte es una de las actividades rectoras de la primera infancia. Apostarle a él garantiza la interiorización del aprendizaje, para que perdure a través del tiempo'.
Protocolo
Las actividades con los mediadores y los niños se llevarán a cabo bajo los protocolos de bioseguridad obligatorios: uso de tapabocas, medición de temperatura y un aforo de 8 infantes, acompañados por un solo adulto. Estos pueden reservar su cupo enviando nombre y edad del niño, nombre del acompañante y teléfono de contacto al correo mercadeomamb@gmail.com, y asistir gratuitamente a la sede ubicada en la carrera 56 # 74-22, barrio El Prado.
