Costeño que se respete ha bailado alguna vez al son de una papayera en carnaval o en cualquier festividad patronal de algún municipio, pero nunca ha escuchado el fandango mezclado con sonidos filarmónicos.
Esta es la apuesta de Mauricio Arroyo Florián, un tolimense de nacimiento, bogotano de crianza y barranquillero por adopción desde hace más de 20 años, que vio en el fandango una oportunidad de trascender a otro movimiento musical.
Arroyo es uno de los ganadores del Portafolio de Estímulos 2020 de la Secretaría Distrital de Cultura, con su proyecto ‘Travesía de un Fadango’, una obra para orquesta sinfónica basada en el ritmo sabanero.
'El fandango es un ritmo del folclor de la sabana, mi idea era presentarlo a través de un formato filarmónico, de música académica, de teatro', relata el músico en conversación con EL HERALDO.
La idea de esta particular mezcla de sonidos se da por el gusto particular de Mauricio y por la 'curiosidad' de explorar nuevas sonoridades, afirmando que le gusta cómo se escucha los rítmos folclócricos en formatos sinfónicos, pues representan 'un color diferente'.
Aunque sus creaciones tienen muy buena aceptación a nivel internacional, tiene claro que en la ciudad esta obra no cuenta con mucho público, pero lo considera que es un primer paso.
'Barranquilla ha crecido mucho culturalmente, yo creo que por eso se ha dado el Portafolio de Estímulos, en este momento quizás esta propuesta no pueda llegar a tener mucho público en la ciudad, pero creo que es un granito de arena para que el ecosistema musical de la ciudad crezca y esté abierto a otro tipo de ritmos sin perder la tradición'.