Señalaba su piel erizada y en más de una ocasión se inundaron de lágrimas sus ojos. A veces melancólico, contaba la historia de los niños a los que ha acogido. Luis Alberto Rincón ha conocido de cerca casos de menores maltratados, en extrema pobreza o en otras condiciones.
El artista plástico y fotógrafo barranquillero es el creador de la fundación Barrio Foto, situada en Puerto Colombia. Su vocación va más allá del lente. Su sentir altruista ha contribuido positivamente a la calidad de vida de niños y jóvenes en el municipio. La casa de Luis Alberto, en la que vive con sus dos hijos y con su esposa, es la sede de la fundación. Su patio cada semana se convierte en escenario de la magia y de la creatividad de los más pequeños que desatan su talento con pinceles y pintura.
Hace 17 años este municipio lo acogió como hijo. Hace 15 creó la fundación de manera voluntaria. Con recursos propios consiguió lo básico para hacer pequeñas exposiciones y comenzar a robarse la atención de los niños del sector Nuevo Horizonte, uno de los barrios de invasión que abrigó a los colombianos desplazados por la violencia y el conflicto armado décadas atrás.
Llegó cuando aún las casas estaban hechas de tablas, latas y otros materiales reciclados. 'Yo veía que los niños andaban sucios, mal vestidos, con hambre y no había un espacio de recreación. Mi esposa y yo pensamos cómo podíamos generar un cambio en estas comunidades, pero a través de nuestro oficio como artistas'.
Con asombro veían como en una casa había hasta cinco niños. 'No había control de natalidad', cuenta. Esta era, y sigue siendo, una de las mayores preocupaciones de la fundación.