Una multiplicidad de escenarios en la ciudad continúan enalteciendo el Mes del Patrimonio. Diversas actividades se han designado para salvaguardar la cultura local.
En esta ocasión, la Fábrica de Cultura se convirtió en el epicentro que acogió a los niños para vivir una jornada llena de color, baile y esparcimiento.
Desde las 10:00 a. m. de este sábado, los más pequeños asistieron en compañía de sus padres para atender el llamado de la Secretaría de Cultura del Distrito, entidad que en alianza con Triple A organizó las actividades que se vivieron en el lugar.
Una de ellas fue pintar. Con crayolas los niños plasmaron colores en una serie de dibujos que representaban distintas edificaciones arquitectónicas de la ciudad como la Funeraria Jardines del Recuerdo, la Iglesia Sagrado Corazón, entre otras.
Para la orientadora de artes plásticas de las Casas Distritales de Cultura, Rubiela Jiménez, este ejercicio es fundamental para estimular el aprendizaje histórico en los pequeños.
'Esto es importante porque es historia y ellos deben saber de dónde vienen sus raíces rescatando estas edificaciones'.
