Los sentidos se abrieron, los lentes de las cámaras también y los flashes de cámaras y celulares se dispararon en Usiacurí. El Pesebre del Atlántico se engalanó con la visita de más de 1800 aficionados a la fotografía que recorrieron sus calles, sus monumentos, el Templo Santo Domingo de Guzmán, sus reservas naturales, sus exuberantes zonas boscosas, sus lugares emblemáticos, la Casa Museo Julio Flórez, su parque mirador turístico, el distrito de manejo integrado Luriza, los Pozos de agua medicinal. Los 1800 inscritos a la Segunda Fotomaratón, capturaron con sus cámaras y sus dispositivos inteligentes, la esencia de uno de los municipios más pacíficos del país, pese a la intensa canícula.