Gareth Bale sorprendió a todo el planeta fútbol al realizar en el minuto 85 de juego, cuando los demás jugadores daban señales de cansancio, un sprint de 59,1 metros en 7,04 segundos que terminó con el gol que le dio al Real Madrid su décima novena Copa del Rey en sus 112 años de historia. El galés anotó su tanto 20 en la temporada y el más importante hasta la fecha.
El contragolpe fue de manual después de una internada de Messi al área del Madrid. Carvajal despejó el centro del argentino hacia el costado izquierdo y fue Isco quien prefirió salir jugando antes de dividir la esférica. El centrocampista se apoyó en Coentrao que esquivó fácil la presión de Dani Alves, lanzado al ataque descuidó su banda, y cedió a Bale que hizo lo demás.
La defensa del Barca estaba desdibujada y el 'príncipe de Gales' inició su maratónica carrera hacia el arco de Pinto. El joven Bartra intentó hacerle falta y sacó a Bale del campo, después de la carga el extremo pisó el área del cuerpo técnico culé, quien miraba con desesperación, y tomó el impulso necesario para meterse de nuevo a la pradera y dejar atrás al central blaugrana.
Treinta zancadas y seis toques al balón, cuatro con la izquierda y dos con la derecha, fueron suficientes para que Bale tocara el cielo con la manos. A la salida del arquero Gareth dio un puntazo al balón, como Romario en sus tiempos, que se coló entre las piernas de Pinto. La euforia se apoderó de los jugadores que rodearon al chico por el que se pagó cerca de 100 millones de euros a principio de temporada.
Cristiano Ronaldo deliraba en la grada junto con los demás lesionados que viajaron a Valencia, el entrenador Carlo Ancelotti se daba la vuelta para preparar los cambios de Illarramendi, Varane y Casemiro, mientras que los jugadores azulgranas veían impotentes como el físico del galés arruinaba sus sueños de no terminar la temporada en blanco.
'Ha sido increíble, creo que nunca he visto nada igual. Parecía que el balón iba fuera, le empujan, corre por fuera del campo… Impresionante', dijo Xabi Alonso en la zona mixta; 'el esfuerzo de Bale ha sido espectacular. Ha sido asombroso. Es la jugada clave y más importante', expresó el director de relaciones institucionales del Madrid, Emilio Butragueño.
La próxima semana el Madrid juega las semifinales de la Liga de Campeones ante el Bayern Múnich. Pasada las dudas por su regular inicio de temporada, Bale enfrenta el reto de guiar a los blancos, junto con Cristiano Ronaldo, a la anhelada final en el estadio Da Luz en Lisboa y conseguir la 'Décima'.