En la vida de José Bendeck (Barranquilla 1990) el tenis es más que un deporte. Es su proyecto de vida que empezó a visionar desde los 5 años, con sus padres, en el colegio Sagrado Corazón y los entrenadores de la Liga del Atlántico. 'La educación y responsabilidad, que adquiriría practicando tenis, sería equitativa o mayor a la que me daría el colegio. Son palabras que alguna vez las escuché del rector y las comparto'.
Así evoca sus orígenes José Bendeck a EL HERALDO. A sus 23 años, con la victoria en la boca, sin olvidar de dónde viene, cuáles son sus valores y con uno de los mayores premios de su carrera en las manos: El Mejor Tenista del Año de la Conferencia Oeste de Estados Unidos, un premio votado por los entrenadores.
Hace cuatro años tuvo el primer impulso con un hito: el primer barranquillero en aparecer con puntos en el escalafón mundial de la Asociación de Tenistas Profesionales.
Ahora cuando está a punto de ser un profesional, pero de la publicidad de la Universidad de Idaho, donde cursa el último semestre, el tenis sigue siedo todo.
Gracias a las raquetas y las pelotas fosforescentes, a su presencia en los equipos de Colombia sub 18, desde agosto de 2010 estudia becado en la universidad pública de Idaho, la más antigua de este estado, ubicado al noreeste del país norteamericano. 'Antes de dedicarme a mi carrera quisiera dedicarle un tiempo a seguir compitiendo como profesional y el tenis me ha dado mucha confianza y seguridad'.
Idaho barrió en los premios con Adrian Legarret, Novato del Año y Jeff Beaman, entrenador del Año, e instructor de Bendeck en Idaho.
'Contamos con un gran apoyo de la universidad, que nos colabora en la presentación de trabajos y en las pruebas, de tal manera que podamos cumplir de acuerdo a la exigencia de los torneos. El apoyo y la confianza de mi entrenador Jeff es fundamental'.