Con nuevo entrenador y un plantel con caras nuevas, Australia promete volver a jugar un fútbol de ataque en el Mundial de Brasil.
Los aussies jugarán en su tercera Copa del Mundo al hilo, aunque el plantel ha cambiado considerablemente. Tim Cahill es el único jugador de la 'Era Dorada' del fútbol australiano que debe estar en el campeonato. Se trata del máximo goleador en la historia de la selección y, a sus 34 años, es el futbolista de mayor experiencia en un equipo que tiene grandes metas para 2018.
'Es parte de la cultura deportiva de Australia, queremos que nuestros equipos sean de ataque', comentó el técnico Ange Postecoglou. 'Y a nuestros jugadores les gusta que sea así'.
Cahill fue parte del equipo que llegó a los octavos de final del Mundial de 2006, cuando perdió ante el eventual campeón Italia por un penal postrero. Un grupo similar, aunque cuatro años mayor, fue eliminado en la fase de grupos hace cuatro años en Sudáfrica.
Goleadas consecutivas de 6-0 a manos de Brasil y Francia a finales de 2013 le costaron el puesto como entrenador a Holger Oseick, y obligaron a Australia a contratar por primera vez en casi una década a un técnico de la competencia local. Postecoglou, quien ha tenido gran éxito en el futbol australiano pero que está a cargo de una selección mayor por primera vez, ha ampliado la búsqueda de nuevos talentos.
'Si hay una oportunidad de que generemos noticias y sorprendamos al mundo, lo haremos', dijo el técnico, poco asombrado por el desafío que representa el grupo en Brasil, donde enfrentará al campeón España, Holanda y Chile. 'Trato de ponerme en los zapatos de los otros entrenadores que dicen, ‘cuando juguemos contra Australia tenemos que ganar’. Los otros tres países tienen esperanzas de avanzar y para que eso suceda nos tienen que ganar. Así que la presión es para ellos'.
Postecoglou hizo esos comentarios a inicios de marzo, luego de que convocó a nuevos jugadores para un amistoso ante Ecuador en Londres, duelo en el que cayeron 4-3 pese a llegar con ventaja de 3-0 al medio tiempo y en el que en nada ayudó la expulsión del portero Mitchell Langerak en la segunda mitad.
El destino parece escrito para algunos de los veteranos cuando Postecoglou entregue su lista preliminar de 30 jugadores previa a un amistoso ante Sudáfrica en Sídney el 26 de mayo. Hará un recorte a 23 jugadores el 3 de junio, tres días antes de su último juego de preparación ante Croacia en Brasil.
Postecoglu dijo que la primera mitad del duelo ante Ecuador lo entusiasmó y tiene una idea clara de lo que su equipo necesita hacer en Brasil, jugar con actitud positiva.
'Esto sería más cómodo si yo tuviera un par de años más en el puesto, pero en muchos aspectos significa que puedo tener un mayor impacto', comentó.