Toda Colombia coincidió en la crítica al árbitro madrileño Carlos Alberto Carballo, ‘El domador’, como le dicen en España, sobre su permisividad en el manejo de las tarjetas.
El árbitro de la Uefa, elegido mejor pito en 2009, 2011 y 2013, tiene antecedentes en su carrera por intervenir en los partidos (7 tarjetas en promedio). Pero en el duelo de ayer contradijo la estadística. De 31 faltas cometidas, pitó dos.
Las jugadas más polémicas fueron el fuera de lugar, que antes había terminado en el gol de Mario A. Yepes y la amarilla a James Rodríguez por una falta a Hulk. La amonestación fue rigurosa si la comparamos con las que hizo Fernandinho, que salió impune en los 90 minutos. Y se quedó corto cuando Julio César derribó a Carlos Bacca en el área, pitó el penalti y debió expulsarlo.
