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Faltaba un minuto para que finalizara el tiempo reglamentario del juego entre Argentina y Holanda. De repente Arjen Robben, que había pasado desapercibido, entró al área y cuando ya alistaba su pierna izquierda para fusilar a Sergio Romero vino de atrás, como una exhalación, Javier Mascherano y le sacó la pelota al tiro de esquina.

Fue la jugada del partido. La que permitió que se fuera al alargue. Si Robben remataba y esa bola entraba se acababa la historia para Argentina, pues no había tiempo para más. En la definición por penales, sí, brilló el Chiquito Romero atajando dos cobros y Messi, Garay, Agüero y Maxi que convirtieron, pero ese cierre brillante y oportuno de Mascherano quedará como una postal para la posteridad de esta clasificación de Argentina a la final de Brasil 2014.

En este Mundial se hablado mucho de la influencia de Messi en el seleccionado argentino, que indudablemente la tiene, de sus goles, de sus regates maravillosos, pero pocos se detienen a hablar del trabajo de Mascherano, una pared en el medio campo albiceleste. Y lo que contagia a sus compañeros, como lo demostró al hablarle a Romero antes del comienzo de la tanda de penales. 'Hoy te convertís en héroe', le gritó.

A Mascherano se le ha conocido con el apodo de el Jefecito, pero en este Mundial ha sido promovido, y con honores a un nivel superior. Ahora es el Gran Jefe, el jugador al que todos los demás escuchan. El capitán sin cinta como lo describió un diario argentino, aunque esta ya la portó en Sudáfrica 2010.

En medio de la celebración por el paso a la final, Mascherano recordó que este equipo se hizo fuerte en Barranquilla, en aquel partido de eliminatoria ante Colombia en el Metropolitano, en noviembre de 2011, que la albiceleste ganó 2-1, tras irse perdiendo 1-0 en el primer tiempo. Si Argentina perdía ese encuentro Sabella iba a ser despedido como seleccionador. Pero ganó y año y medio después está en la final del Mundial.

Es algo similar a lo que se ha dicho del equipo del 86, que según sus propios protagonistas, también se fortaleció en Barranquilla en un partido ante Junior el cual terminó 0-0. Un mes después, guiada por Maradona, Argentina fue campeón mundial en México.

'El partido contra Alemania es el más importante de nuestras carreras. Hay que disfrutarlo, porque este ha sido un largo camino de años para muchos, de muchísimos palos, pero que hoy nos encuentra llenos de felicidad, de responsabilidad, de expectativa, la gente en Argentina seguirá confiando en este equipo hasta el domingo y ojalá podamos estar a la altura', señaló Mascherano.

El centrocampista del Barcelona, que en Brasil disputa su tercer Mundial, reconoció que se les viene una dura prueba como es enfrentar en la final a Alemania, sobre todo por el antecedente que trae al haber goleado 7-1 al anfitrión Brasil.

'Nos espera algo más difícil que lo de hoy, pero creo que el equipo ha demostrado que es consciente de lo que se juega. Que quiere, que tiene ganas, que lo desea y, como decimos siempre, la ilusión nuestra es muy grande y seguiremos aferrados a ella hasta que eso se apague o no dé más'.

Asegura que a Alemania tratarán de jugarle con inteligencia, al igual que hicieron ante Holanda. 'Hoy con corazón no lo ganamos, lo ganamos con inteligencia, cada uno de los jugadores que estuvo dentro de la cancha pensó qué era lo mejor y por eso creo que hicimos un gran partido'.