Enviado especial, Las Vegas, EE. UU. Si querían agarrones o empujones se equivocaron de lugar, el Teatro KA del MGM Grand Hotel fue lo más parecido a la mesa de junta de las Naciones Unidas, donde predominó la diplomacia y la religión.
Manny Pacquiao siguió en la misma tónica, relajado, sonriente y haciéndose ‘selfies’. Su promotor Bob Arum lo elevó a la categoría de ejemplo para la humanidad, asegurando que la misma necesita de hombres como el filipino. Cuando le llegó el turno a su apoderado este resaltó la altura en la que lo ha puesto Dios y se comprometió a compartir su testimonio con su rival, con el que antes espera estremecer el mundo del boxeo a punta de golpes este sábado en el combate Mayweather-Pacquiao.
'Después de esta pelea me quiero sentar con él (Floyd Mayweather) para compartirle mi fe', dijo Pacquiao, pero no recalcó si era para sacar del camino de los excesos a su rival de este 2 de mayo en la disputa de las tres coronas en juego del AMB, OMB y FIB, y reconciliar a oveja perdida que parece ser algunas veces ‘Money’.
La otra orilla, la de Mayweather apeló a lo mismo: un discurso sobrio que recalcó las cualidades de la intensidad del entrenamiento dirigido por su padre Floyd y su tío Roger, y a garantizar el por qué esta pelea es para los protagonistas las más importante de la historia.
Las únicas chispas dialécticas vinieron cuando Bob Arum, el presidente de Top Rank, resaltó a la programadora HBO como la mejor en su terreno en un claro señalamiento a Showtime, la empresa que televisa las peleas de Mayweather. Y el otro que lanzó una chispa a la hoguera sin lograr el incendio del bosque, fue Freddi Roach, quien dijo que 'ojalá venga al combate', refiriéndose a Floyd, pero nadie en la otra esquina le siguió las aguas.
Mientras que por los pasillos del MGM Grand se pasearon figuras de la talla de Mike Tyson y el boxeador activo Shanon Porter, seguido por una nube de fanáticos que los acosaban para una foto o un autógrafo.
El próximo y último encuentro será mañana en la ceremonia del pesaje para el cual se dispusieron 16 mil boletas a un costo de 10 dólares cada una y en la reventa ayer se conseguían a 300 dólares. Para la velada del sábado, ayer a las afueras del hotel sede de la cartelera se encontraban en ‘ganga’ una boleta por 11 mil dólares y dos por 20 mil.
En cuanto al servicio de Pague Por Ver algunos hoteles solo están entregando pases a sus huéspedes, pero no lo están haciendo de forma pública. En algunos otros sitos ver la pelea por televisión tiene un costo de 150 dólares.
En los hoteles ya comenzó la especulación. Cuartos de 42 dólares pasarán del jueves al viernes y sábado a 300 dólares la noche.