Lionel Messi volvió a ser capitán ayer al marcar el gol con el que Barcelona se proclamó campeón de la liga española al imponerse 1-0 en cancha del previo monarca Atlético de Madrid.
El equipo azulgrana se proclamó monarca por 23ra vez en su historia, a falta de una fecha para el final del campeonato.
La victoria simultánea del Real Madrid, 4-1 en cancha del Espanyol, no sirvió para nada al cuadro merengue, que cerró la 37ma fecha con cuatro puntos de desventaja respecto al nuevo campeón.
Los azulgranas tienen ahora opción de lograr un histórico triplete en caso de ganar también la final de la Copa del Rey contra el Athletic de Bilbao el 30 de mayo en su propio estadio y la de la Liga de Campeones el 6 de junio, en Berlín frente a la Juventus.
'La Champions es más prestigiosa pero la liga es más importante. Hemos sido los mejores con diferencia', dijo el mediocampista Sergio Busquets.
Luis Enrique evitó aclarar si seguirá o no al frente de la nave azulgrana: 'Es evidente que me gustaría que sea el principio de un ciclo. No lo sé. Nos quedan dos finales. Hasta que no acabe la temporada no me pronunciaré sobre mi futuro', declaró el estratega.
Real Madrid goleó al Espanyol con triplete incluido de Cristiano Ronaldo (59, 83 y descuentos), pero quedaron con 89 puntos en la tabla de posiciones y sin margen para alcanzar las 93 unidades que cuenta el Barsa.
Con una fecha pendiente, el portugués Cristiano permanece como máximo artillero con 45 goles por los 41 de Messi, aunque el portugués, actual Balón de Oro, tendría cas opciones de revalidar el galardón ante el resurgir de Messi, cuatro veces premiado con el trofeo.