La zozobra por las tres derrotas al hilo con que llegaron los jugadores de Real Cartagena al juego de anoche ante Fortaleza, se reflejó en la poca confianza que estos tuvieron frente al arco del portero bogotano Sebastián Duque, la figura indiscutible del empate a dos goles entre ambos elencos, a la hora de definir.
Real Cartagena debió salir con los brazos en alto al final, pero debió resignarse a sumar su cuarto punto de los últimos 18 jugados y quedar sumido en una pequeña crisis de resultados aunque por el trámite del partido el elenco de Jota Jota López mostró intensidad, agresividad, despliegue físico, pundonor para venir siempre de atrás en el marcador y al menos, terminar salvando la honra ante unos doce mil espectadores, una cifra poco usual para un lunes festivo por la noche.
Edis Ibarguen, ex jugador heroico, abrió la cuenta al minuto 45 del primer tiempo luego de traducir en gol una falta en el área de Humberto Mendoza sobre Germán González. El tan criticado cuando militó con la casaca amarilla abrió el marcador en esa primera parte cuyo dominador absoluto fue el once auriverde.
Para el complemento, el pitazo de la reanudación fue una largada como si se estuvieran disputando la final de los cien metros planos de los Olímpicos, y Real salió a imponerse por intensidad y permanente búsqueda.
Al minuto 55, los heroicos le cobraron por partida doble una falta del zaguero rival Raúl Angulo cuando Diego Echeverri corría en solitario hacia la puerta contraria. Falta y expulsión. En el cobro, que fue a 20 metros, Mendoza desplegó su fuerza y en el rebote Jota Jota Salcedo igualó las acciones.
Sin embargo, una triangulación para entrar al área cartagenera le permitió a Kevin Londoño, de Fortaleza, poner a su equipo arriba nuevamente, 1-2, al 66'. Cuatro minutos más tarde, Yesus Cabrera desperdició un penal que fue atajado por Duque.
El mismo Cabrera tuvo revancha al 75' sacando un remate desde un costado, con poco ángulo, para marcar el gol más bonito de un partido con mucha acción en las áreas.