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'No me la creo', la frase que retumba en la mente del golfista barranquillero Ricardo ‘Pipo’ Celia, ganador este fin de semana del Ecuador Open, competencia del PGA Tour Latinoamericano (tercer torneo más importante en la estructura golfística americana).

Celia, administrador de empresas de 23 años, consiguió su primer título profesional tras firmar una tarjeta de 275 golpes, 9 bajo par.

Primer título a nivel profesional, ¿qué sintió?

Algo indescriptible por la forma como gané el torneo. Me siento muy orgulloso, con una alegría inmensa por tanto trabajo que le pone uno al ejercicio, a cada torneo, pensar en los extenuantes viajes, los partidos difíciles. Cuando uno gana solo puede sentir felicidad y saber que se cumple el objetivo.

¿Cuando estaba en el campo sentía que el torneo podría ser suyo?

Tuve un segundo día muy importante con 5 golpes bajo par y en la última ronda, en cuatro de los cinco primeros hoyos, hice birdie y ahí sentí que la competencia podría ser mía. Al final gané mi primer título, me preparé para ganar y espero seguir cosechando más triunfos. Aún no me la creo.

En el campo del Quito Golf & Tennis Club debutó como profesional y ahora ganó, imagino que le tiene aprecio...

Sí, claro. Son lindos los recuerdos que me trae ese campo y como dije antes, espero seguir triunfando.

Se impuso por tres golpes a los estadounidenses Ian Davis y Timothy O’Neal, ¿estaba pendiente de lo que hacían ellos?

Sabía que dependía de mí, si yo jugaba bien, mi juego iba a estar bien. Me la pasé preocupado por cumplir la tarea y no en estar pendiente de lo que hacen los demás. Eso fue clave. Además conté con el asesoramiento de María Isabel Baena, ex golfista pereirana.

¿Es parte esencial María Isabel Baena?

Bastante, ella está conmigo, me habla mucho, es una gran ayuda desde la parte mental y en mi juego. No me tenía mucha confianza cuando jugaba y ella me ayudó.

En el Karibana fue, al final de las rondas, el mejor colombiano posicionado, ¿eso lo motivó?

Quedé como de 40, no fue un buen puesto, pero me di cuenta que tenía un nivel bastante bueno para poder competir en cualquier parte del mundo porque mi juego es completo, le estoy pegando bien a la bola. En el golf hay que mantener la humildad, hay que disfrutar de las victorias, pero hay que estar preparados porque uno nunca sabe cuando puede perder.

¿Cuál es el próximo reto de Ricardo Celia?

Ahora me encuentro en Bogotá para disputar desde el jueves, en el Club Campestre El Rancho de Bogotá, otra parada del PGA Tour Latinoamericano.

¿En el PGA Tour Latinoamericano cuál es su principal objetivo?

Quedar entre los cinco primeros del Orden al Mérito. Ahora me mantengo, pero quiero seguir ascendiendo. Mi meta a principio del año era quedar entre los 10 primeros, pero mi juego ha evolucionado y ese es mi objetivo.

Su padre jugó a nivel amateur, ¿qué le dice de su juego?

Juego con él en Barranquilla, no me comenta mucho del swing, dice que está bien. En lo que más me ayuda es en la logística: viajes, patrocinio, entre otras cosas. Ha hecho una gran labor.

¿Cuál es el ‘Major’ que le gustaría ganar?

Sin duda el Masters de Augusta.

¿Cuando no está en un campo de golf a qué se dedica?

Me siento perdido (risas). ¡No mentiras! Salgo con mis amigos, con mi novia (Anelie Cure) y veo mucha televisión, sobre todo fútbol.

¿Cuando ve fútbol a quién le hace fuerza?

Al Barcelona y al Junior, tu papá (risas).