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Calixto Avena Casas no solo tiene relación con el fútbol y el Junior. El ex portero del cuadro rojiblanco es un apasionado por el deporte. Avena, quien nació un 18 de octubre de 1943, en San Antero, Córdoba, también fue beisbolista, basquetbolista, softbolista y hasta atleta.

Su carrera futbolística comenzó en Millonarios, pero en 1965 llegó a Junior, equipo en el que estuvo hasta 1970. Calixto recuerda con gran entusiasmo esos partidos en el Romelio Martínez.

'La gente llegaba desde las 8 de la mañana, eso era un espectáculo. No he conocido otra afición como la de Barranquilla', sostiene Avena telefónicamente desde Lorica, donde actualmente reside.

El ‘Cohete’, como fue apodado cuando estuvo en Junior, afirma que era uno de esos cancerberos al le gustaba volar de palo a palo.

A Calixto le duele no haber podido ser campeón con Junior, logro que sí consiguió con Millonarios (en 1964). 'Teníamos un equipazo. Todo para ser campeones. No sé por qué no logramos el título. Es la pregunta que aún ronda en su mente.

¿Qué hay la vida de Calixto Avena?

Vivo hace tiempo en la ciudad de Lorica. Yo nací en San Antero, Córdoba. Lorica queda a 10 minutos de San Antero. Me dedicaba a la ganadería, pero actualmente me dedico al comercio.

¿Usted cómo llegó al Junior?

Bueno, yo jugaba en Millonarios, en donde estuve tres años. En 1965 tuve un contacto con varias directivas de la ciudad de Barranquilla donde iba a salir otra vez Junior, que tenía años de estar sin salir. Me contactaron y me fui para Barranquilla.

¿Cómo fue esa época en la que usted estuvo en Junior?

Llegué en 1965 a Junior. Se armó un equipo, creo que de los mejores jugadores que ha traído Junior durante toda su historia. Estaba Dida, Quarentinha, Valentín, la mayoría de ellos venían de la selección de Brasil. También teníamos a los mejores jugadores nacionales como Joaquín Pardo, Arturo Segovia, Segrera, El ‘Papi’ Peña, Walberto Maya, grandes jugadores; pero nunca pudimos conseguir un campeonato. A las nueve de la mañana ya el Romelio estaba lleno todos los domingos, ese era un espectáculo ese equipo. Lo que más recuerdo es la afición en Barranquilla, tremenda. La afición es un espectáculo, no la hay en otra ciudad.

¿Por qué lo apodaban ‘El Cohete’?

Me gustaba volar mucho, y un periodista de Barranquilla me tomó una foto y salió en una revista que se llamaba Vea. Yo tengo aquí en mi casa una foto inmensa, casi del mismo tamaño mío, de una actividad que hice en el estadio Romelio Martínez.

¿Y eso de lo de ‘Cohete’ se lo creyó usted bastante?

Sí me lo creía, claro, todavía es y me lo creo (risas). Todavía sigo siendo el ‘Cohete’ Avena.

¿Qué clase de arquero era usted?

Jugaba mucho dentro del arco, pero volaba bien, sobre todo en los centros, y tenía mucha fortaleza

¿Cómo era usted fuera de la cancha?

Yo era una persona muy apacible, tranquilo. Me gustaba mucho salir a caminar, y me gustaba mucho el entrenamiento, ya que yo me dediqué a varios deportes; jugaba béisbol, jugué basquetbol, estuve con la pre selección Colombia en basquetbol, estuve también en Selección Colombia de Fútbol, estuve en varias eliminatorias al Mundial.

¿Y cómo se decide por el fútbol?

Me decido por el fútbol porque estuve en un campeonato juvenil por el departamento de Bolívar en Girardot y el ‘Caimán’ Sánchez me llama a la selección juvenil, eso fue en 1962. ‘Caimán’ Sánchez me llama a la selección juvenil y ese año firmé con Millonarios también, ahí estuve hasta el año 1965 y de allí pasé a Junior hasta el año 1970.

¿Para usted cuál ha sido el mejor portero que ha estado en el Junior?

El mejor portero de Junior fue Efraín ‘El Caimán’ Sánchez, lo máximo en lo que es ser arquero. En Junior han pasado muchos arqueros: Delménico, De Luque, Largacha, infinidades de arqueros.

¿La atajada que más recuerda con Junior?

El día que jugamos con Pelé, ese día le tapé un tiro libre, eso fue un espectáculo.

¿Qué opina del portero que tiene actualmente Junior, Sebastián Viera?

Es uno de los mejores arqueros que ha traído Junior.

¿Qué piensa de David Ospina, actual portero de la Selección Colombia?

Todos los arqueros deben tener continuidad y ahora tuvo algunos errores, pero ese es el arquero de la Selección. Colombia ha contado siempre con buenos cancerberos, tanto él como los otros dos arqueros son lo mejor que hay en Colombia.

¿Usted en qué posición se ubicaría de los arqueros de la Selección Colombia?

Uno de los primeros (risas). Estoy entre los diez mejores arqueros de la historia de Colombia.

Se habló mucho cuando usted se fue de Junior. ¿Por qué partió?

Yo tuve varios altercados con directivos y entrenadores que no me trataron como yo pensé que deberían tratarme, y un día se me dio por retirarme, después no volví a tratar de jugar fútbol. Dije que me vendieran y nunca quisieron venderme.

¿Es cierto que a usted no le gustaba el fútbol, que lo tenía como un pasatiempo?

Sí, pero después le comencé a coger cariño.

¿Por qué no le gustaba?

Mucho viaje, mucho entrenamiento y no estaba muy acostumbrado a eso.

¿Se dice que usted se fue de Junior porque no le gustaba casi el fútbol, que ya se había aburrido?

Una parte de eso fue realidad.

¿Qué pasó?, ¿qué fue lo que le aburrió?

Tuve un partido malo, íbamos ganando 4-1 y yo me hice tres goles y la gente comenzó a abuchearme y se me metió en la cabeza que me iba a retirar y me retiré.

¿Quién es el mejor jugador que usted ha visto jugando en Junior?

El mejor jugador definitivamente Dida, un espectáculo. De Colombia, Joaquín Pardo.

'Era bueno en todos los deportes que practiqué'

¿De los deportes que practicó cuál era el que más le gustaba?

El fútbol. Yo estuve en béisbol en Selección Córdoba.

¿Pero usted alternaba el fútbol con otra disciplina?

Fui atleta también, con los famosos hermanos Gutiérrez en Cartagena en esa época.

¿Cómo un hombre de Córdoba llega al fútbol? ¿Cómo fueron esos primeros inicios suyos?

Yo estudiaba en Cartagena. Un día me dijeron en el colegio donde jugaba, La Esperanza, que faltaba un arquero y me metí a jugar ese día. Jugué dos o tres partidos intercolegiados y de ahí me llamaron a la Selección Bolívar. Ahí me gradué y me llamaron a la Selección Colombia.

¿Siendo un jugador amateur?

Sí, con apenas tres partidos. Después llegué a Millonarios y de ahí pasé a Junior.

¿En qué posición jugaba en el sóftbol?

En primera base, ya estoy un poco lento, pero todavía me defiendo bastante.

¿Qué le decían por practicar varios deportes?

Que yo estaba en todo (risas). Pero ajá, uno se mete a eso porque le gusta.

¿Pero en todo era bueno?

Claro que sí. En todo. Estuve en selección, fui preseleccionado en basquetbol por Colombia, en el béisbol representé a Córdoba, mi departamento.

¿Es cierto que usted era muy rico?

Sí, y lo tomaba muy tranquilamente, eso no tenía que ver con nada, yo me codeaba con todo el mundo. Yo no aparentaba nada, era un tipo muy tranquilo.

¿En qué barrio vivía en Barranquilla?

Vivía en la 81B con 41, más arribita del ‘Santo Cachón’.

¿Ninguno de sus hijos ha seguido sus pasos?

Los hijos míos todos son profesionales, hay uno que es ingeniero de sistemas.

¿Qué es eso que nunca se le olvida y que a cada rato está en su mente?

Me acuerdo de los partidos de una eliminatoria al Mundial de Chile. Los partidos fueron en Barranquilla y yo terminé siendo la figura.