Compartir:

Sin duda alguna lo más fascinante que tiene el deporte es la incertidumbre sobre el resultado. Lo que sucederá es poco predecible. No hay equipos invencibles en ningún deporte y cualquiera en un buen día puede derrotar al mejor. Lo hemos visto a través de la historia y así seguirá siendo.

Eso sucedió este domingo en la ronda final del Masters. Un grupo de humanos participando en el Masters, aunque sean los mejores humanos en este deporte, enfrentaron sus imperfecciones en una disciplina en la que se entrenan a diario para perfeccionar. A pesar del esfuerzo, no alcanzan la perfección por alto que eleven su propio nivel.

Uno de los eventos más espectaculares del deporte es el Masters de Augusta y nada se iguala al domingo en el Masters. Nada intimida más en el escenario más intimidante del golf.

Jordan Spieth se paró en el tee del hoyo 10 en -7 y una ventaja de 5 golpes. No es la primera vez que alguien llega a esa posición y sale con las manos vacías. Los más recientes desastres fueron el amateur, Ken Venturi, en 1956, al anotar 80 en la ultima vuelta y perder por un golpe; Greg Norman, en 1996, llevaba una ventaja de 6 golpes sobre Nick Faldo, disparó 78 el domingo y quedó a 5 del ganador y Rory McIlroy en 2011 quien anotó la peor vuelta por un profesional después de estar liderando al terminar la tercera vuelta. Dos meses después ganó el US Open, su primer major, con 8 golpes de ventaja sobre Jason Day y un total de 16 bajo par.

Este año, el campeón defensor, Jordan Spieth, enfrentó muchos problemas con su swing desde la segunda ronda. Al terminar el sábado manifestó que era consciente que no podía seguir dependiendo de su putter. Si había una razón para que estuviera al comando del torneo a pesar de no golpear bien la pelota, se debió a su eficiencia sobre el green.

Cuando parecía que había reencontrado su ritmo con los 4 birdies en fila en los hoyos del 6 al 9, falló su salida en el 10 con madera 3 y le produjo un bogey; falla su driver en el 11 y hace el segundo bogey consecutivo. Todo terminó en el hoyo 12, donde muchas aspiraciones han muerto en Augusta National. Falla la salida al agua, su tercer tiro, al agua, su quinto al bunker de atrás del green y termina con 7 en este par 3. Cuádruple bogey que le hace perder la punta del torneo. En media hora pasó de liderar por 5 a escoltar por 3.

A pesar de esto, este joven tejano de 22 años no se rindió. Regresó con birdies en el 13 y 15, pero necesitaba una seguidilla como los 4 de la primera vuelta. Falló en el 16, no agarró el green del 17 y se esfumó el sueño de defender el título y ser el primero en ganarlo dos veces de punta a punta y además en años consecutivos; y ser el más joven en acumular tres majors. En dos meses defenderá su título en el US Open y continuará en su misión de ganar majors y entrar en el grupo de los mejores de todos los tiempos.

Varios se quedaron cortos. Varios que andan tras su primer major como Casey, Westwood, Dustin Johnson, Matsuyama. Otros, tratando de completar el grand slam en su carrera, como McIlroy a quien el Masters lo sigue evadiendo.

Nada se parece a lo que hace Johson en las rondas finales de los majors. Ninguno se da tantas oportunidades como él, pero ninguno falla tanto como él. Parece que tuviera todo lo que se necesita para ganar, pero le falta la parte mental.

Westwood parece destinado a no ganar un major. Todo indicaría que lo mismo le sucede a Sergio García y Paul Casey. Ningún japonés ha ganado un major a pesar de que varios han estado cerca. Es algo parecido a lo que sucedía con los australianos, hasta que Adam Scott ganó en Masters en 2013.

La victoria de Danny Willett tiene el ingrediente de lo que hizo Spieth del 10 al 12. Se subió 6 golpes en 3 hoyos y le entregó la punta cuando el jugaba el 15. En contraste, Willet hizo birdies en 13 y 14. Quizá se entera de que está en la punta mientras jugaba el 15. En el 16 hizo birdie y aumenta la ventaja. Cerró con dos pares y puso un score final de -5. A esas alturas solo lo podían alcanzar su compatriota Westwood, Dustin Johnson y el mismo Spieth. Ninguno se le acercaría. Johnson tuvo chance de águila en el 15 y salió con birdie, no embocó el del 16 e hizo doble bogey al 17. Westwood, jugando a su lado, hizo águila al 15 y se dio chance de ganar, pero tres putts en el 16 esfumaron la posibilidad. Spieth, tuvo un segundo aire, pero igual, no le alcanzó.

A favor de Willett tenemos que reconocer su excelente nivel durante los 4 días. Se mantuvo en la competencia durante los días de fuerte brisa y remató con un excelente 67, dominando sus emociones y venciendo la presión de los últimos hoyos liderando el Masters. Es un sólido jugador multiple ganador en el tour europeo. Quedó segundo en la Carrera a Bubai de 2015, el equivalente a la FedEx americana, detrás de Rory McIlroy.

Como dicen los americanos, es el domingo en el Masters.