Mientras unos 80 hinchas de Atlético Nacional cantaban y brincaban en los alrededores de la concentración del equipo verde en Barranquilla, una señora se movía de un lado a otro desesperada y asustada por los juegos pirotécnicos que se esparcían por todas partes.
La señora no tenía ninguna indumentaria alusiva a Nacional, pero su corazón si guarda un gran cariño por el conjunto antioqueño y estaba ahí porque esperaba ansiosamente a uno de los jugadores de Nacional. Juana Jiménez corrió cuando vio llegar el bus en el que venían los futbolistas del cuadro verdolaga y todo porque quería ver a Alexander Mejía, su nieto y quien actúa como volante de primera línea.
Doña Juana no pudo evitar las lágrimas cuando vio a su nieto, quien la abrazó y la hizo pasar a la concentración. 'Estoy muy contenta y le deseo lo mejor Alexander. Tenía muchas ganas de ver a mi nieto por eso llegué hasta acá al hotel', indicó la señora Jiménez.
Nacional arribó a su sitio de concentración a las 6:15 de la tarde y ninguno de los jugadores quiso entregarle declaraciones a la prensa. Víctor Ibarbo, Macnelly Torres y el arquero Franco Armani fueron los más ovacionados por sus hinchas.
El equipo de Reinaldo Rueda afrontará este miércoles ante Junior el juego de ida de las semifinales de la Liga Águila, a partir de las 7 de la noche, en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez. A la hora del partido, doña Juana Jiménez estará en su casa pendiente de su nieto, pero curiosamente no verá el partido. 'Me da mucho nervio ver los partidos de Alexander. No quiero que le den un mal golpe o le pase algo. Cuando se acaban los himnos me paro y me dejo de ver el partido', apuntó la abuela del volante barranquillero.
Víctor Ibarbo se acercó a varios hinchas y se tomó varias fotografías. 'A pesar de las ausencias vamos a darlo todo. En este equipo todos son titulares', le gritó un aficionado al atacante nacionalista.