El púgil antioqueño Céiber Ávila, luego de la derrota por decisión unánime ante el ruso Mijail Aloyan y que le costó la eliminación de los Juegos Olímpicos de Río, en la categoría 52 kilogramos, expresó que se siente triste, que quiere ver rápido a sus familiares y no desea saber nada de boxeo.
'Siento tristeza por la decisión, pero bueno, así es el boxeo y así lo califican. No se puede dar reversa a esa decisión', destacó Ávila.
Ávila era una de las máximas esperanzas de Colombia para conseguir y medalla y se quedó a un triunfo de lograrlo.
'Siento que me cortaron los sueños porque me baja la moral totalmente. No quiero saber más nada del boxeo, no pienso nada bueno en estos momentos. Fueron muchos los esfuerzos y sacrificios que hice. Entrenas cada día, lejos de tu familia para que una decisión injusta te corte el sueño', agregó el acongojado pegador.
El entrenador cubano al servicio de la Selección Colombia, Rafael Iznaga, declaró sentirse robado tras la polémica decisión.
'Vimos a un Céiber manejar el primer asalto bien, pero de pronto fue parejo, pero en el segundo y en el tercero fue una paliza. El ruso no quería saber nada del combate y nos sentimos robados'.
