El grupo de hackers Fancy Bears, de origen ruso, encendió ayer una polémica tras revelar un supuesto listado de deportistas olímpicos que habían utilizado sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento en los Juegos Olímpicos de Río. Entre esos señalados estaba el pesista colombiano Óscar Figueroa, medallista de oro olímpico. El antioqueño salió a defender lo hecho en Brasil manifestando que el uso de la sustancia Dexametasona fue para 'desinflamar rápidamente' tras someterse a las operaciones de hernias lumbares.
'La sustancia que se me aplicó (Dexametasona) no es de dopaje, es de control y la utilicé, con todas las autorizaciones posibles del COI (Comité Olímpico Internacional) y de la IWF (Federación Internacional de Halterofilia) para poder competir en Río. Colombia puede estar tranquila porque eso fue un escándalo de pataletas de ahogado porque Rusia no pudo ni participar, no tenían deportistas porque todos salieron dopados'.
Figueroa expresó además que si hubiese estado dopado en los Juegos Olímpicos la noticia estallaría en Río de Janeiro.
'Si yo hubiese utilizado sustancias dopantes, ahí mismo en Río se hubiese despertado todo porque hacían controles y los resultados salían 48 horas después de la muestra. Además, yo cargaba, en Río, con un documento en el que estaba señalado el permiso de la sustancia, la cual se me habilitó desde el 12 de enero. El médico de Coldeportes, Jaime Albarracín, y todos los demás entes estaban enterados. La historia fue limpia, todos mis logros han sido limpios y siempre me caractericé por ello en mi carrera', expresó el pesista de 33 años.
Figueroa le dijo a EL HERALDO, además, que recibió excusas de la Wada (Agencia Mundial Antidopaje)
'Ya me notificó la Wada las excusas por la falta de seguridad y los inconvenientes que se han presentado. Son hackers y pues qué más se hace', agregó.