Nunca arrugó la cara. Jamás un mal gesto. Sí a la entrevista, sí a la foto, sí al autógrafo, sí a la charla, sí a todo. José Quintana, ya con cinco temporadas en Grandes Ligas, sigue tan humilde y tan amable como cuando lanzaba con los Caimanes en el estadio Tomás Arrieta. El pitcher bolivarense, después de una destacada campaña con los Medias Blancas de Chicago, visitó este jueves a EL HERALDO, saludó a todo el mundo, entró a la reunión de editores y contó detalles de lo que ha sido un alegre 2016.
¿Cuál es el balance que hace de su temporada?
Fue una temporada bastante exitosa en la parte individual, conseguí muchas metas que me había trazado y superé muchas estadísticas a comparación del año anterior. Estoy muy contento por mantenerme saludable durante todo el año, por poder cumplir con todas las salidas. Voy a descansar ahora y a preparar el 2017.
¿Esta ha sido su mejor temporada?
En estadísticas esta ha sido mi mejor temporada, he mejorado en muchos aspectos de lanzados, también por ser seleccionado por el juego de Estrellas. También estuve entre los mejores lanzadores de la Liga Americana. Quiero seguir ahí, demostrando que en Colombia hay talento para el béisbol.
Terminó entre los diez mejores brazos de la Liga Americana…
Es un gran premio al esfuerzo. Siempre es muy bueno hacerse notar en una Liga como esta. Me gustó mucho estar todo el año entre los mejores. Seguiré trabajando lo más fuerte posible para seguir manteniendo este nivel.
¿Qué le pasó a Medias Blancas, que era uno de los equipos favoritos de la Liga Americana?
Pasaron muchas cosas, altos y bajos durante la temporada, tuvimos un gran arranque, pero empezó a fallar un poco la parte defensiva, a veces el pitcheo no aparecía, a veces la ofensiva. A ese nivel siempre vas a enfrentar a quipos bastante sólidos y empezamos a tener problemas por ahí. La directiva ahora mismo tiene la idea clara sobre cuáles fueron las cosas que pasaron. Esperemos que esas cosas mejores para el próximo año. Tenemos un gran plantel y esperamos poder competir.
Al equipo no le fue bien, pero a usted sí…
Me estuve manteniendo durante cada cinco días con el deseo de competir, con el deseo de darle oportunidad a mi equipo de ganar pasara lo que pasara. Si estábamos en una mala racha o por cualquier motivo, trataba de mantener el ánimo del equipo junto con muchos compañeros. En ese aspecto pude consolidarme más. Me ha gustado mucho estar en ese tope de lanzadores y ayudar a mi equipo.
Sumó trece victorias y terminó con una efectividad de 3.20…
Es importante en un año tan largo mantener la efectividad de esa manera, pero uno siempre quiere más. Trataré de seguir mejorando para cada día convertirme en mejor lanzador.
¿Cuántas veces ponchó a David Ortiz en su último año en Grandes Ligas?
(Risas), lo ponché varias veces, en el último juego en Chicago lo ponché dos veces. Cuando fui a Boston me conectó un hit. Antes de cualquier estadística con una leyenda como 'Big Papi', es una gran oportunidad, se siente uno bendecido, poder enfrentar a jugadores que posiblemente serán Salón de la Fama. Enorgullece a uno tener esos logros. Seguiré tratando de conseguir más. Es una persona bastante alegre, que transmite mucha confianza, muy positivo. Tuve mayor oportunidad de conocerlo en el Juego de Estrellas. Hablamos mucho y me dio buenos consejos. Siempre ha tratado de apadrinar a los latinos, enseñarles la manera como uno debe dudar mucho en este juego. Cuando una persona de estas te habla, tú siempre estás atento.
¿Después de los ponches le decía algo?
Después de los ponches a esa gente no se le puede hablar mucho (risas). Después de los juegos, a veces, uno se los encuentra saliendo del camerino. Ahí nos saludamos y se ve la hermandad latina. Eso es algo muy bonito.
Quedó cercano a los 200 ponches. Esta vez fueron 181.
Sí, cada vez más cerca. Esa es una de las metas que me he trazado y espero cumplirla el próximo año.
Esta fue la temporada en la que más entradas lanzó, 208 en total…
Sí. Ha sido en la que más innings he lanzado, superé la del año pasado. Siempre es bueno seguir mejorando y consiguiendo más. Eso deja ver que estuve sólido durante los juegos. Eso es bueno cuando uno es abridor. A veces me sentía un poco cansado, pero era más grande el deseo de seguir compitiendo.
Terminó muchos partidos sin decisión. ¿Cómo maneja esa situación en la que muchas veces deja el juego a favor y el equipo no lo respalda?
Hace parte del béisbol, es algo que tu no controlas. Los muchachos han tenido el deseo de darme el soporte con carreras, pero a veces se han encontrado con grandes lanzadores. Ellos me ayudaron mucho en las trece victorias que conseguí.
¿Cuando estaba en el Juego de Estrellas no sintió ganas de que lo pellizcaran para percatarse si lo que vivía era cierto o un sueño?
Sí. Sensaciones como la del Juego de Estrella es algo inexplicable. Fue algo que me sorprendió, en algunos momentos sentía que estaba en un sueño. Compartir con los mejores del béisbol fue algo muy bonito, creo que fue algo muy rápido, simplemente dos días, pero se disfruta mucho. Agradezco el poder haber estado allá. Quiero seguir asistiendo.
¿Cómo tratan a los peloteros que llegan por primera vez al Juego de Estrellas?
Se ve mucha humildad. Te atienden como rey, eso es algo muy bonito. Lo mejor del béisbol. Hay demasiadas cosas que tú no te imaginas. El estadio lleno, la gente siguiéndote, es algo muy chévere, se disfruta demasiado. Mucho más porque había dos colombianos al mismo tiempo, algo histórico.
Descríbanos la atención de rey que recibieron…
Son muchos eventos, hay toda clase de emociones. Te reciben en una carpa roja, a tu familia la atienden como si fueran jugadores también, tienen puestos privilegiados, te dan suites, buenas habitaciones, pero ante todo es la sensación de estar en el estadio al lado de grandes jugadores de béisbol.
¿Se llevó su camarita y todo para la selfie con sus ídolos?
Hasta se me descargó el teléfono (risas). Fue algo muy lindo.
¿A qué pelotero en especial buscó para compartir con él una foto y un diálogo?
El centro de atención fue David Ortiz por ser su último año en un Juego de Estrellas. Dio unas declaraciones antes del juego. Nos dio buenos consejos, habló en inglés y español para tratar de mostrar todo lo que vivió en 20 años de carrera. Estaban muchos otros jugadores que no había tenido la oportunidad de tratar, que a veces, cuando uno los tiene en contra, cree que son 'bollones' y estirados, pero cuando llegan esos juegos eso es una familia.
¿De quién pensaba que era 'bollón' y luego cambió su percepción cuando lo conoció de cerca?
Josh Donaldson es uno de los peloteros que uno desea que juegue para el equipo de uno por lo competitivo que es, pero siempre demuestra ser bastante diferente a los demás, cualquiera dirís que cae mal, pero es una persona muy alegre, que respira béisbol.
¿Cómo vivió la llegada de Dónovan Solano a los Yanquis?
Fue algo impresionante. A los Yanquis uno va hasta de 'bat boy'. Fue algo muy bonito para él ser el primer colombiano en ponerse la camisa de los Yanquis, sobre todo por su tradición. La verdad estoy muy contento por pertenecer a los Chicago White Sox, pero Dónovan consiguió ser el primer colombiano en los Yanquis y muchos disfrutamos ese momento. Esperemos más cosas buenas para su carrera.
Usted comenzó en los Yanquis…
Sí, yo jugué para el sistema de ligas menores con los Yanquis durante cuatro años. Viví muchas experiencias con ellos. La organización te enseña muchas cosas que me sirven hoy.
¿Se rumoró que usted podía pasar a los Yanquis?
Rumor es rumor. La verdad no fue nada real, no tuve conocimiento de eso. Igual son cosas que uno no controla. Eso nada más llega a oídos de los directivos. Si en realidad pasa, te lo hacen saber, si no, un simple rumor.
Dónovan Solano prefirió no seguir en los Yanquis porque lo iban a pasar a Triple A. ¿Qué opina?
Son decisiones muy personales. Respeto y apoyo su decisión. En mi caso también hubiera hecho lo mismo. Esto es un juego y un negocio, es la carrera de cada jugador. Uno va a tratar de estar donde tenga mayores oportunidades y pueda cumplir sus objetivos.
¿Listo para el Clásico Mundial?
Sí, espero poder ponerme la camisa de Colombia por primera vez en un Clásico. Va a ser algo muy bueno para todos los muchachos. Le va a abrir las puertas a muchos y espero estar con la Selección. No hay excusas, podemos y vamos a ir todos.
¿Cómo ve el grupo de Colombia con República Dominicana, Canadá y Estados Unidos?
Un grupo bastante sólido. Tiene el campeón del Clásico (República Dominicana), la potencia del béisbol, que es Estados Unidos, pero también tenemos un país llamado Colombia, que tiene muchos deseos y ganas de brillar, eso vale mucho más que cualquier cosa. Hay que jugar.
¿Cómo vivió la muerte de José Fernández, pelotero de los Marlins?
Muy duro. Todavía el béisbol no se recupera de esta tragedia. Conmovió a todo el mundo. Una gran pérdida.
¿Lo conoció?
Sí, en un par de ocasiones compartí con él. En el Juego de Estrellas tuvimos más oportunidad de hablar y era una persona muy jocosa, alegre, con energía. Era muy joven, es una lástima que se pierda una vida de esta manera.
El próximo año tiene que aparecer por lo menos un colombiano en postemporada…
Sí, por supuesto, tenemos uno o dos años que no tenemos colombianos en postemporada. También creo que el número de grandesligas nuestros va aumentar en 2017. Hay varios jugadores asomándose.
¿Sus favoritos para llegar a la Serie Mundial?
Es una pregunta difícil. Me gusta mucho Toronto, la artillería que tienen, y el pitcheo de Cleveland. Creo que va a ser una serie cerrada. Me inclinaría por Toronto en la Americana. En la Nacional veo bastante sólidos a los Cachorros.
¿Se acabará la maldición?
Vamos a ver qué pasa. Los veo bastante sólidos en pitcheo, defensa y ofensivo, no han bajado en ninguno de los tres aspectos.
¿Qué hace en sus vacaciones?
Descanso y comparto mucho con mi familia y mis amigos. Ahora, más que todo, disfruto de mi hija (de ocho meses de edad). En temporada es muy difícil, a veces quiero jugar con ella y está durmiendo, cuando se despierta me tengo que ir al estadio.
¿Practica algún otro deporte?
Me gusta jugar fútbol con compañeros del béisbol. Somos malos todos, pero así es mejor para que nadie se lastime. Nos divertimos mucho. También le damos al Play Station y me gusta ir a la playa a descansar.
¿De qué juega?
De volante de confusión (risas).
A mitad de año, antes de la final ante el DIM, envió video de apoyo al Junior…
Sí, soy hincha fiel de Junior. Con eso he crecido. Siempre lo sigo desde Estados Unidos. Ayer pasó a la final. Ha tenido altibajos este año, pero en cualquier momento del año, afrontar una final es algo grande para el equipo y la afición. Ahí estaré. Espero que consigan esa Copa.
¿La gente lo reconoce bastante en la calle?
La gente me cuida mucho en Barranquilla, estoy agradecido con esta ciudad. Nací en Bolívar, pero me siento muy barranquillero. Aquí la gente me ha tratado muy bien. En algunos lugares me reconocen y disfruto el estar con todo el mundo y conversar, pero estoy muy agradecido con esta ciudad.
¿Por qué firma los autógrafos con la derecha si lanza con la zurda?
Ese es uno de mis secretos, los que se han podido dar cuenta, me lo han preguntado. La historia es larga. Ya ustedes la saben. Cuando estaba pequeño me regalaron un guante para zurdo (que se usa en la mano derecha). Lo único que hago con la izquierda es lanzar, todo lo demás es con la derecha. Mejor así para que la izquierda esté bien descansadita.
¿Por qué no come pescado en Estados Unidos?
Porque allá no se consigue la mojarrita roja (risas). Allá como bastante pollo, mucha pechuga, sobre todo antes de jugar.
¿Qué música pone en el camerino?
Yo pongo salsita. Los compañeros me ponen antes de los juegos la canción 'La Bicicleta', de Carlos Vives y Shakira.