Desde niños, Mike Schmulson y Chelo de Castro fueron inseparables amigos y el periodismo solventó un lazo que permaneció hasta el final de los días del fallecido comentarista deportivo, especializado en béisbol y boxeo.
Chelito de Castro, encargado ayer de leer en la Sinagoga Bet-El una sentida carta (‘Asistentes a la última cita’) escrita por su padre, divulgó a EL HERALDO cómo asumió su progenitor la noticia de la partida de su amigo y colega.
'Fueron cuatro días duros porque Mike fallece el jueves y mi papá solo se enteró hasta el lunes cuando iba a asistir a su programa radial. Antes de salir recuerdo que lo sentamos y le dimos la noticia. Él enseguida se descompuso y en el programa habló con la voz entrecortada', destacó Chelito.
'Definitivamente la vida y las premoniciones son cosa seria. El mismo jueves que Mike fallece, mi papá, como si lo supiera, cae de repente en una depresión y nos preocupó mucho porque mi padre no está en buen estado de salud', agregó el artista.