Puerto Rico se apresta a una cita con la historia hoy, a partir de las 8 p.m., en Los Ángeles, cuando enfrente a Estados Unidos o Japón en el partido por la final del Clásico Mundial de Béisbol, y en el que han depositado esperanzas millones de boricuas.
La novena de la Isla del Encanto derrotó la noche del lunes 4x3 en 11 entradas a Holanda, en un partido donde las emociones estuvieron sobre una montaña rusa.
'Fue un juegazo muy emocionante porque las gradas estaban llenas de puertorriqueños con sus banderas, gorras alusivas al evento tocando pleneras, trompetas, güiros y otros instrumentos en una rumba hacia la victoria', comentó a la AFP vía telefónica la presidenta del Comité Olímpico de Puerto Rico, Sara Rosario.
Rosario, quien se encuentra en Los Ángeles apoyando al equipo boricua, recordó que Puerto Rico en los últimos años ha vivido momentos de mucha alegría con grandes victorias como las medallas olímpicas de Javier Culson y Jaime Espinal en la Olimpiada de Londres (2012) y con la medalla de oro de Mónica Puig en Río-2016.