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Por:  Edson Cabeza Jabba

A pesar de sus cortos 15 años de vida, Belén Morales, jugadora de baloncesto nacida en España, pero de padre barranquillero y madre cordobesa (Punta de Yáñez), juega como una profesional. Está aún en etapa de desarrollo y sus frutos empiezan a tomar vuelo. En Buenos Aires, Argentina, la pívot de 1.88 metros de estatura, hizo parte de la Selección Colombia que obtuvo el cupo al Mundial sub-17 femenino donde el país se adjudicó una plaza histórica.

'Son muchos los sentimientos encontrados con esta clasificación al Mundial de Rusia. Tantas lágrimas, tanto esfuerzo y estar lejos de tu familia y de tu zona de confort hace que el objetivo cumplido sea más valorado. Es bueno hacer soñar a un país y defender los colores de tu bandera', expresó a EL HERALDO la jugadora nacida en Pego, provincia de Alicante (España).

Desde los 9 años se interesó por el baloncesto. En territorio ibérico hace parte de la cantera del club San Antonio de Cáceres, en el cadete femenino A. En los años 2014 y 2015 defendió los colores del Atlántico y en un torneo Pony Baloncesto (en Medellín) el club Molino Viejo, en cabeza de su entrenador Héctor Fabio Gómez, se interesó por su juego, le ofreció una mejor calidad de vida deportiva y, además, una beca para ingresar en el colegio de la Universidad Pontificia Bolivariana en la ciudad de la eterna primavera. Pese a que en Antioquia ha mejorado por el apoyo recibido, tiene el sabor amargo de no defender los colores del Atlántico, ya que se considera una 'barranquillera más'.

'Me da nostalgia saber que no puedo defender los colores de mi sangre y de mis entrañas que es barranquillera, pero lastimosamente el deporte en Barranquilla no es apoyado y yo quiero salir adelante, probar cosas nuevas y allá no lo puedo hacer. Antioquia me ha recibido con mucho aprecio y se ve mejor el apoyo. Invito a los dirigentes de la Liga para que se pongas las pilas para que los jugadores se queden allí y representen con orgullo su bandera, destacó Belén.

Ese apoyo que ha recibido en suelo antioqueño es gracias al entrenador Guillermo Blanco, el mismo que la dirige en la Selección Colombia.

'Ha sido un gran entrenador. Lo considero como uno de mis padres. Él me ha inculcado el creer que soy capaz de todo y me ha servido en mi etapa de crecimiento'.

En Argentina, luciendo la casaca 18, Belén se destacó ante Canadá en semifinales al anotar siete puntos y capturar cinco rebotes. Colombia, al final, concluyó en el cuarto lugar.

'Tenemos que prepararnos duro, mejorar la técnica y esperamos quedar en un buen puesto y cambiar la historia del baloncesto en el país. Tenemos un año para lograrlo y vamos a ir con toda a ese Mundial', concluyó Belén.