Luego de lograr la 66ª pole de su carrera ayer en Bakú (Azerbaiyán), el británico Lewis Hamilton (Mercedes) tiene ante sí una ocasión de oro hoy para aproximarse o incluso alcanzar a Sebastian Vettel, líder del Mundial.
Hamilton parece haber recuperado el pulso por el cetro mundial, después de unos inicios titubeantes en el Mundial de Fórmula 1, lastrado por los problemas con los neumáticos de las ‘Flechas Plateadas’.
El propio Toto Wolff, director ejecutivo de Mercedes, había dado la señal de alarma en mayo al acabar el Gran Premio de Mónaco, en el que Hamilton hubo de contentarse con el séptimo puesto. Su monoplaza y el del finlandés Valtteri Bottas (4º en el Principado), se vieron superados por los dos Ferrari, que se colocaron al frente del Mundial de constructores.
El tres veces campeón del mundo (2008, 2014 y 2015) recorrió los poco más de 6 kilómetros en 1 minuto 40 segundos y 593 milésimas, superando a su compañero de equipo el finlandés Valtteri Bottas (1:41.027).
Si la carrera de hoy finaliza con Vettel a pies de podio y Hamilton en lo más salto, será el inglés el nuevo líder del Mundial. 'Nuestra clasificación no es ideal pero la carrera es larga', se esperanzó Vettel.