Es la reina en patines de los samarios. A la que pechichan cada vez que salta a la pista. Esa que aún tiene voz de niña, pero habla con personalidad, sabiendo lo que quiere. Kerstinck Sarmiento Anchila nació hace 18 años en Pescaíto, un barrio en Santa Marta que brota figuras de gran nivel.
Sarmiento Anchila comenzó practicando fútbol, el deporte donde se hizo grande Carlos ‘El Pibe’ Valderrama, otro pescaitero, pero unos patines la enamoraron y decidió darle rienda suelta a su sueño. Sabe la responsabilidad que lleva en sus patines, pero ella no le teme a ese reto. Cada vez que salta a un patinódromo lo hacen pesando en su gente y en ciudad.
Kerstinch se lució en su tierra, a la que le regaló tres medallas en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta 2017. La chica, amante de la música urbana, se colgó el oro la prueba de los 500 metros, la plata en la contrarreloj individual en los 300 metros y el bronce en los 100 metros velocidad por carriles.
La joven que hace dos meses compite en la categoría de mayores le contó a EL HERALDO cómo ha sido su experiencia en este deporte y las metas que espera alcanzar.