'Voy a trabajar en el español', prometió el colombiano Michael Poettoz, quien estuvo unos días en Bogotá ya como el primer colombiano clasificado a los Juegos Olímpicos de Invierno en Pyeongchang (Corea del Sur), que se cumplirán del 9 al 25 de febrero de 2018.
Hizo esa promesa porque es caleño, pero no habla español, pues a los dos años de edad fue adoptado por una pareja de franceses, Michel y Cecile Poettoz, quienes lo llevaron a vivir a Los Alpes, donde se olvidó de su lengua nativa y adquirió la de su segunda nacionalidad, Francia.
Allá se enamoró del esquí en la nieve, desde niño lo practicó y poco a poco llegó al alto rendimiento, pero como en Francia esa disciplina tiene nivel con medallistas olímpicos y entrar era difícil, Micha decidió representar a su país de origen, aunque no hable español, pero sí sea amante de la comida, la música y su gente amable.
'Yo podía competir por Francia, pero prefiero representar a Colombia, porque soy colombiano, me gusta mi país, me gusta la comida, la salsa y el carisma de los colombianos', reconoce el esquiador que ya llevó el tricolor nacional el año anterior a los Juegos Olímpicos de Invierno de la Juventud en Lillehammer, Noruega.
Después de la estadounidense Cynthia Denzler, quien llevó el tricolor nacional en los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver en 2010, por tener la nacionalidad colombiano que logró su padre, de ascendencia suiza, pero quien vivió muchos años en Colombia, Poettoz es el primer nacido en Colombia que estará en las justas de invierno.
Aunque posiblemente no estará sólo, porque el sanandresano Pedro Causil está muy cerca de inscribir su nombre en Pyeongchang para la modalidad de long track del patinaje sobre hielo, cuando se cumpla el próximo fin de semana la última Copa Mundo clasificatoria.