Se llama Cristiano Ronaldo, es delantero y goleador, tiene 9 años, samario y juega en la Escuela Otero Fútbol Club, de Santa Marta. Su nombre, como su forma de jugar, llaman la atención de quienes por estos días observan los partidos del torneo ‘Caribe Champions’.
Se apellida Brito Polo y fue bautizado así, no por una casualidad, sino a propósito, pues Ronald, su padre, es amante del fútbol y un aficionado furibundo del Real Madrid, sentimiento que le ha traspasado a su esposa Karina.
Es tanta la pasión por este equipo español que su otro hijo, de 10 años, también lleva el nombre de otra rutilante figura merengue, ‘Robson’, el auténtico nombre del brasilero Robinho.
Tras convertir ayer un gol de antología (lo hizo de cabeza al mejor estilo del crack portugués), ante el Deportivo Lewis y festejarlo como si hubiera sido el del título, Cristiano Ronaldo acaparó todas las miradas, aunque lo que quizás más le llamó la atención fue que lo entrevistaran por el canal internacional Fox Sport.
Sin inmutarse ante la repentina fama que hoy adquiere, le dijo a EL HERALDO que 'me llamo cristiano Ronaldo, pero… yo soy yo no otro'. 'Me siento feliz con mi nombre porque es famoso, aunque yo también lo voy a ser', anotó.
Manifestó que desde los cinco años juega en la Escuela Otero y que aspira a jugar en un equipo colombiano grande.
Sin embargo, a diferencia de su padre, para él, en un plausible acto de independencia y personalidad, su ídolo es Lionel Messi y su equipo el Barcelona.
Aunque piensa en grande y su deseo es ser una estrella del balompié mundial, jugando ya sea en el Barcelona o en el Real Madrid, de España, confesó que le gustaría comenzar el profesionalismo en Colombia.
'Quisiera iniciarme en el Unión Magdalena o en el Atlético Nacional', precisó.