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El Barrio Abajo rememoró, una vez más, aquellas épocas donde la tradicional ‘Chequita’ se tomaba las calles de uno de los rincones más beisboleros de La Arenosa.

La Chequita se resiste a morir y eso es gracias a la gestión de hombres como Zamir Bolaños y su comitiva, quienes se propusieron organizar un torneo grande cada tres meses, donde se incluyen a la mayoría de barrios de Barranquilla. Los 12 equipos participantes ‘adoptan’ un equipo de las Grandes Ligas, para divertirse en torno a un palo y una checa.

'¡Foul, foul!', '¡Out!', 'La checa quedó en el triángulo… ¡es out! ¡es out!', '¡Home runnn!', se escuchaba una y otra vez en la esquina de la calle 47 con carrera 53, donde la gente se reunió para compartir en familia y disfrutar de este tradicional deporte, además de una buena comida y una cerveza bien helada, que combata el inclemente sol.

Del ‘Clásico de Chequitas’, como es llamado este torneo, que se disputa entre ayer y hoy, hacen parte equipos como ‘Los Piratas’, ‘San Francisco’, ‘Cubs’, ‘White Sox’, ‘Toronto’, ‘Washington’, ‘Yanquis’, ‘Houston’, ‘Marlins’, ‘Bravos’, ‘Mets’, ‘Medias Rojas’ y un invitado especial, los Cabreritas de Cartagena, todos con un objetivo claro, destronar a los ‘Piratas’… pero no de Pittsburgh —el equipo de la MLB—, sino de Montecristo y Modelo, los actuales campeones.

Los ‘Piratas’ iniciaron con pie derecho la defensa del título, al vencer ayer 1-0 a San Francisco y están listos para buscar hoy el segundo trofeo consecutivo. 'Estamos preparados… hay que echar para adelante y quedar campeones nuevamente. Esperamos que mañana la suerte nos acompañe', dijo José Martínez, ‘right field’ de los ‘Piratas’, quien no ocultó su emoción por volver a disfrutar del deporte de su niñez.

'Me alegra mucho rescatar la tradición. Este es el deporte de nuestra infancia, el béisbol de barrio, como lo llamamos nosotros. Nos sentimos como unos niños haciendo esto, además que compartimos en armonía con la familia, los amigos, con la gente de acá. No podemos permitir que la Chequita se pierda y quede en el olvido', agregó.

Como en todo torneo competitivo, hay decisiones polémicas, jugadas espectaculares, equipos que amenazan con no jugar más porque no están de acuerdo con una decisión, pero que finalmente vuelven al diamante callejero, porque puede más la pasión, que la rebeldía momentánea.

'Hay que meterle VAR a esta vaina, porque a veces esa chequita se pierde y ahí es cuando comienza la discutidera por una decisión', dijo entre risas un espectador que apreciaba el juego desde una de las dos tiendas que rodean el improvisado estadio.

Hoy culminan las emociones. Hoy habrá nuevo campeón. Pero lo que realmente importa es que la chequita sigue más viva que nunca.