El técnico argentino Ricardo Gareca renovó ayer su contrato con la selección peruana con el reto de conseguir un boleto al Mundial de Catar-2022, tras negociaciones que se demoraron por un escándalo que afecta al presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).
'Estoy muy feliz de renovar el vínculo', dijo Gareca en una conferencia de prensa, al subrayar que su trabajo será 'una continuidad de lo que se vino realizando' desde 2015, cuando inició su labor con Perú.
‘El Tigre’ Gareca precisó que el contrato contempla una relación laboral de tres años, con opción a prolongarla un año en caso Perú clasifique al Mundial de Catar-2022.
'Estamos felices de extender el vínculo por 3 años más con la posibilidad de extenderse por un año más en caso se consiga la clasificación', detalló el DT argentino en una rueda de prensa llena de bote a bote.
'Queremos agradecer a la FPF por confiar nuevamente en nosotros', agregó Gareca, quien vestía un traje oscuro y corbata de tonos rojos.
El argentino dirige a la selección inca desde 2015 y su renovación se volvió un imperativo para la FPF por ser el artífice de la clasificación de Perú al Mundial de Rusia-2018, tras una ausencia de 36 años.
Las conversaciones para lograr un acuerdo se habían demorado debido a que coincidieron con un escándalo de audios de jueces que salpicó al presidente de la Federación, Edwin Oviedo, y desató una crisis interna en la corporación.
Gareca evitó en todo momento precisar su posición sobre la situación judicial que atraviesa Oviedo, el gran ausente en esta presentación.
'No me gusta enjuiciar a la gente, de eso se encarga la justicia', señaló tras remarcar que 'yo tengo un compromiso con lo deportivo'.