El Barcelona ganó este domingo la Supercopa de España remontando para imponerse 2-1 al Sevilla, que falló un penal en el minuto 90, en una final jugada por primera vez fuera de España, en la ciudad marroquí de Tánger.
Pablo Sarabia abrió el marcador para el Sevilla (9), antes de que Gerard Piqué empatara aprovechando un balón suelto (42) y Ousmane Dembélé hiciera el 2-1 definitivo (79).
El Sevilla empezó sorprendiendo con un rápido gol tras unas internada del colombiano Luis Muriel, que dejó el balón a su derecha, donde apareció Sarabia para hacer el 1-0 (9), pero pronto empezó a sufrir.
El Barcelona se hizo pronto con el control del centro del campo y de la pelota con, además, un Messi hiperactivo en su regreso a la competición tras las vacaciones.
El nuevo primer capitán azulgrana se multiplicó para ayudar y asistir a sus compañeros, como el pase que dejó a Jordi Alba, para que el lateral sacara un disparo que rechazó el meta Vaclik (18).
A la media hora, el '10' pateó una falta que cabeceó alta Luis Suárez (27), pero poco después un nuevo golpe franco supuso el gol azulgrana.
Messi sacó la falta desde la frontal del área ajustada a la cepa del palo, el balón rebotó en el portero y en el poste, y entonces apareció Piqué para empujar el balón a las redes sevillistas (42).
Tras el descanso, el Sevilla salió con más garra y llegó algo más a los dominios de Ter Stegen, pero las mejores ocasiones seguían siendo del Barcelona.
En el 63, Dembélé se internó en el área, pero su disparo lo sacó el portero Vaclik, aunque poco después el flamante campeón del mundo se sacó un disparo desde la derecha que se coló rozando el larguero (79).
El gol, a falta de diez minutos para el final, desarboló al Sevilla, que lo siguió intentando con más corazón que cabeza y entonces llegó su mejor ocasión en un penal en el último minuto cometido por Ter Stegen sobre Aleix Vidal, pero Wissam Ben Yedder mandó el balón a las manos del portero azulgrana.