Kenny Redondo, Yuranis Pino y Jere Quiroz comparten la misma pasión. Todas exponen su humanidad en el ring y el anhelo de ser campeonas mundiales está latente en sus pensamientos. Hoy, a partir de las 2 p.m., en el barrio La Magdalena, comienzan su camino hacia el cinturón en el Campeonato Nacional organizado por la Liga de Boxeo del Atlántico en compañía de la empresa mexicana Pueblo Boxing. El certamen concluye este domingo.
Redondo, con 20 años de edad, es la mayor entre las tres púgiles. Se muestra tímida ante los micrófonos y las cámaras. Hace seis meses se dejó seducir por el cuadrilátero y los jabs.
'Al comienzo no me gustaba por lo agresivo que es, pero cuando lo conoces y estás metido en esto, te das cuenta que la disciplina que exige te ayuda en la vida. Soy una persona no muy organizada y el boxeo me ha ayudado en todo', expresa la barranquillera, quien cuenta con estudios como auxiliar administrativo.
'Soy una pegadora estilista. En su momento entro a la candela. Me gusta moverme más en el ring. He visto muchas boxeadoras, pero quiero imponer mi estilo. Yo me gusto (risas)', responde Kenny cuando se le pregunta por sus cualidades deportivas
'Me imagino en Los Ángeles realizando una súper pelea y por un título', añade sin sonrojos.
Tres años menor, pero de la misma tierra. Yuranis Pino inclinó su sendero hacia el boxeo gracias a su padre Jaime, quien no pudo saltar al profesionalismo, pero realizó varios combates en la rama aficionada.
'Entré al boxeo porque mi padre lo realizó. Él no pudo llegar lejos, pero mis tíos me hablaban de que lo hacía bien. Él igualmente me da su apoyo y este deporte, el cual inicié hace año y medio, me ha ayudado a superar cosas de mi vida. Me anima y lo he encontrado como un refugio. Me reconforta cada día más', explica Yuranis, fiel seguidora de los puños y movimientos de Cecilia Braekhus, colombiana nacionalizada noruega y dueña de cinco títulos mundiales en el peso wélter. 'Me gusta mucho su estilo de pelear. Quiero lograr todo lo que ella ha logrado', agrega.
Yuranis participará por primera vez en el certamen del barrio La Magdalena, según ella, un espacio propicio para seguir atrayendo más púgiles.
'La verdad es espectacular contar con estos espacios. En el Atlántico no se estaban dando esos escenarios y que nos den ahora la chance de mostrarnos es genial. Yo he sido preselección Atlántico, pero tengo pensado pertenecer a San Andrés. Espero las cosas mejoren', concluye Yuranis, quien considera que en la isla puede 'tener mayores oportunidades'.
Desde San Andrés
Mientras Yuranis asegura que en San Andrés puede aspirar a un mejor futuro boxístico, Jere Quiroz, pegadora sanandresana, de 18 años, llegó al certamen en Barranquilla sin el respaldo suficiente, pero con las ambiciones y las esperanzas de ganar medalla por las nubes. Jere hace un año tomó la decisión de ganarse la vida dando trompadas.
'Yo siempre he dicho que la vida te va a golpear más duro. El boxeo te ayuda a liberar tu mente aunque es rudo. Siempre me ha gustado el deporte y hubo un momento en que me llamó la atención y me he metido en este mundo. Yo soy contragolpeadora. Me considero una mujer ruda y sé que voy a llegar lejos como profesional', concluyó Jere, quien aseguró que llegó a Barranquilla con 'recursos de sus entrenadores y vendiendo boletas'.
El campeonato
Miguel Ángel ‘Ñato’ Guzmán, uno de los organizadores del evento, habló del sistema del campeonato y de lo bien que le viene al boxeo atlanticense realizar esta actividad por segundo año al hilo.
'La convocatoria fue mayor porque ahora hay cinturones y eso motiva a los pegadores. Van a participar 25 clubes, en todas las categorías y todos los pesos. Serán 295 pegadores de Atlántico, San Andrés, Bolívar, Córdoba, Magdalena, Cesar, La Guajira y Maicao. Boxeador que pierda queda eliminado. La final será el domingo', cerró el entrenador.