No se puede jugar mejor al fútbol. Este miércoles en Madrid, la industria miraba con envidia al Ajax y a una ciudad como Amsterdam, donde un equipo se asoma al éxito con autoridad y con una nómina de futbolistas no famosos, que son de verdad grandes jugadores.
Ese es el gran mérito. Construir una plantilla a precio razonable. Mientras los grandes expresos se divierten con multinacionales como Neymar, Mbappé, Cristiano... resulta que los jugadores determinantes, los que hacen disfrutar están en el Ajax, con un fútbol total y una apuesta de Erik ten Hag, que hace temblar los cimientos del entretenimiento en las grandes Ligas europeas.
Tadic, Neres, Ziyech, De Jong, De Light, Van de Beek, Schøne, Mazraoui, Onana se destacan en un equipo ‘ADN Cruyff’, que sorprende a todos.
Este Ajax sabe fichar, sabe promover, pero también inventa a nivel táctico. Fichar e inventar en el campo. No hay mejor fórmula.
Han sabido dotarse de un estilo que cautiva. Han mandado a la lona, con autoridad, al Real Madrid y a la Juventus con dos chicos de casa al frente, liderando la cuadrilla. De Ligt, de largo, el mejor central de Europa del momento y futuro jugador del FC Barcelona. Y De Jong, fichado ya por el cuadro azulgrana.
El Ajax podrá ganar la Champions o no, el fútbol es voluble, pero ha dejado ya su tarjeta de visita, con una generación espectacular y que debería estar protegida por la Uefa durante un par de años para garantizar el show. Destruir este equipo, no volverles a ver juntos el año que viene es un palo para la Champions League y para el fútbol.