La atacante Megan Rapinoe festejó el cuarto título mundial de la historia de Estados Unidos en el fútbol femenino, un logro que consideró 'extraordinario y surrealista', este domingo en Lyon, y aprovechó para reincidir en su reclamación de igualdad salarial con el equipo nacional masculino de su país.
'Todas las jugadoras durante este Mundial hemos brindado el espectáculo más increíble. No se puede hacer nada más para impresionar. Hay que pasar a la etapa superior. Estamos listas para tener la igualdad salarial', reclamó en la conferencia de prensa posterior a la final ganada por 2-0 ante Holanda.
El pasado 8 de marzo, durante la jornada internacional de los derechos de la mujer, 28 jugadoras denunciaron a la Federación Estadounidense de Fútbol (USSF) por discriminación ante un tribunal de Los Ángeles, reclamando igualdad salarial con el equipo masculino.
Hace unos días la prensa publicó que la USSF y las jugadoras han comenzado una mediación sobre el tema.
Sobre el torneo del 'Team USA', Rapinoe consideró que la 'experiencia' fue un valor importante para superar los momentos más difíciles.
'Nos hemos apoyado en nuestra experiencia. Hemos tenido partidos difíciles, en los que hemos jugado más o menos bien. Había mucha presión, de la prensa sobre todo. Nosotras, las jugadoras más experimentadas, teníamos responsabilidades respecto a las más jóvenes, que se han integrado bien. Por eso hemos logrado este éxito', apuntó.
Rapinoe aplaudió también la labor de su seleccionadora, Jill Ellis,
'Sobre Jill Ellis, cuando ves las victorias que hemos logrado, su recorrido habla por sí solo. Tenemos un cuerpo técnico de gran clase, es difícil hacerlo mejor', subrayó.
'Extraordinario y surrealista'
Poco antes, Rapinoe había realizado sus primeras declaraciones a distintas televisiones.
'Esto es increíble. Nada más que pensar en todos los que han trabajado por esto, en todas las jugadoras... Tenemos a todas nuestras familias aquí. Esto es realmente extraordinario y surrealista', declaró Rapinoe a la televisión francesa TF1.
Rapinoe, protagonista del torneo además por sus declaraciones públicas en contra de Donald Trump, fue elegida la mejor jugadora del torneo (Balón de Oro) y se llevó igualmente la Bota de Oro a mejor goleadora con seis dianas.
Fue la autora, de penal, del primer gol de la final ante las holandesas. El segundo fue obra de Rose Lavelle, a la que Rapinoe aplaudió.
'Rose Lavelle ha regateado muy bien, ha abierto el juego. No es una estrella emergente, es ya una superestrella', subrayó Rapinoe.
'Esto es una recompensa. Es el día más importante. Estamos locas de alegría, pero también muy cansadas', admitió tras un mes de competición en Francia.
En declaraciones a otra televisión francesa, Canal Plus, destacó que la unidad es la clave del equipo.
'No nos rendimos, estamos unidas y nos entregamos al máximo para ganar', aseveró.