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James Rodríguez se quedó en el banco de suplentes esperando por una oportunidad, ayer en el triunfo del Real Madrid 3-1 sobre el Celta de Vigo, en Balaídos. Los tantos del triunfo merengue fueron obra de Benzema, Kroos y Lucas Vásquez. Con todo decidido, el Celta maquilló la derrota con el gol de Iker Losada en el 90.

La nota negativa del partido fue la expulsión del croata Luka Modric (56), cuando la ventaja del Real Madrid era de apenas 1 a 0. Pero el equipo de Zinedine Zidane no solo no vio peligrar su triunfo, sino que fue ampliando su ventaja y acabó el encuentro sin sufrir para llevarse los tres primeros puntos del curso.

La victoria tiene además especial valor en el inicio de esta Liga ya que le sirve para colocarse ya con tres puntos de margen sobre su gran rival, el FC Barcelona, que el pasado viernes había abierto el campeonato español con una derrota 1-0 en el terreno del Athletic de Bilbao.

Por su parte, el Villarreal de Carlos Bacca igualó ayer 4-4 con el Granada de Adrián Ramos. El porteño jugó siete minutos y el vallecaucano doce.