El santandereano Germán Darío Gómez protagonizó una triste y conmovedora situación durante la disputa de la prueba de ruta de la categoría junior del Mundial de Ciclismo, cuya sede es Yorkshire, Inglaterra.
En medio de la competencia, el pedalista colombiano sufrió una avería en su bicicleta y empezó a esperar ayuda de su equipo. Sin embargo, nunca apareció el carro del representativo nacional. Gómez se empezó a desesperar al ver que todos los autos de los otros ciclistas pasaban uno tras otro y no se asomaba el colombiano.
A pesar de que levantaba la bicicleta como pidiendo ayuda a los vehículos de otros corredores, ninguno se solidarizó. En un momento, el deportista criollo sintió tanta impotencia que estalló en llanto.