Compartir:

Los Nacionales de Washington entraron en la historia de las Grandes Ligas al conquistar la Serie Mundial por primera vez en 50 años, mientras que los Astros de Houston se quedaron sin probar las mieles.

La noche del pasado miércoles fue histórica pues todo parecía que los Astros, con el excelente pitcheo que llevaba su abridor Zack Greinke, se llevarían su segundo título en los últimos tres años.

Pero no todo salió como esperaba el equipo que para muchos era el favorito.

Los Nats lucharon a capa y espada cada juego de esta emocionante Serie Mundial, la quinta que se va al máximo de siete juegos en los últimos diez años.

Los Nacionales se apoyaron en el bateo oportuno en los últimos tres innings con jonrones de Anthony Rendón y Howie Kendrick, para imponerse a los Astros con marcador de 6x2.

Y en Washington, cientos de seguidores celebraron compartiendo emociones en una gran fiesta al aire libre cerca del estadio de los Nacionales.

Histórico triunfo. Además del primer título en 50 años, el equipo se convirtió en el sexto que llega a los playoffs como comodín y se lleva la corona, como lo hicieran los Marlins (1997 y 2003), Angelinos (2002), Medias Rojas (2004), Cardenales (2011) y Gigantes (2014).

'Ganamos una. Finalmente ganamos una (serie)', dijo lloroso el venezolano Aníbal Sánchez, lanzador de los Nats.

Y no es para menos. Un equipo que comenzó la temporada regular por el piso y a los dos meses tenía un récord adverso de 19-31, que luchó por el comodín, se enfrentó en primera ronda a los temibles Dodgers de Los Angeles, grandes favoritos incluso para imponerse en la Serie Mundial, no parecía tener un camino fácil de transitar.

Sin embargo, vencieron a los Cerveceros, a los temibles Dodgers y barrieron en el campeonato liguero a los Cardenales de St.Louis,.

Otra hazaña del conjunto de la capital es que se unen a los Yanquis de 1996 en ganar nueve juegos como visitantes en una misma postemporada.

Por su parte, los Astros perdieron la oportunidad de llevarse su segundo título en los últimos tres años luego de haber tenido una campaña regular fantástica con 107 victoria.

Pero muchos de sus jugadores terminaron con récord en el certamen como el venezolano José Altuve, que terminó los playoffs con 24 imparables, un récord de la franquicia, y a dos de su compatriota Pablo Sandoval que tiene el récord de las Grandes Ligas a ese nivel con los Gigantes.

El cubano Yordan Alvarez, el novato número 40 en la historia de las Series Mundiales con un vuelacerca en el Juego 5, en el cual terminó de 3-3.

El también cubano Yuli Gurriel con 12 dobletes en postermporada.

Por los Nacionales, también merece destaque especial el estelar abridor Stephen Strasburg, quien fue nombrado el MVP (Jugador Más Valioso) después de ganar los Juegos 2 y 6 en Houston y con un marcador global de 5-0 en estos playoffs.

'Es simplemente surrealista', dijo por su parte Strasburg. 'Hacerlo con este grupo de chicos fue algo especial. No renunciamos y nos tomó a todos hacerlo'.

Por su parte, el mánager Dave Martínez es el segundo piloto boricua en ganar el Clásico de Otoño en forma consecutiva. Alex Cora se había coronado el año pasado con los Medias Rojas de Boston. 'Ganarlo (la serie), qué sensación más increíble', dijo Martínez. 'Todavía no sé, pero puedo decirte mañana que me despertaré sintiéndome muy diferente'.