El béisbol te da sorpresas, sorpresas te da el béisbol. Los Gigantes pisaron a los Caimanes. El equipo novato no tuvo respeto del campeón y le pasó por encima para llegar a la final en su primera presentación en la Liga Profesional de pelota caliente colombiana. Los anaranjados se impusieron ayer 4-2, en un estadio Édgar Rentería con la mayoría de sus tribunas abarrotadas (como el lunes), y ganaron la serie semifinal 3-1.
Contra todos los pronósticos, los ‘Giants’ criollos, que oficiaban de local, derrotaron al poderoso equipo reptil, que tenía dos grandesligas en su line-up como Dilson Herrera y Harold Ramírez.
La novena creada por el legendario ex pelotero barranquillero Édgar Rentería se enfrentará en el duelo por el título y por el tiquete a la Serie del Caribe 2020 (que se disputa desde el 1 de febrero) ante el ganador de la otra llave semifinal entre Toros de Sincelejo y Vaqueros de Montería, que se encuentra 2-2. Anoche celebraron los astados 8-6. Hoy se define el otro finalista en la capital de Sucre.
Los Caimanes, el equipo con más títulos en la historia del béisbol profesional nacional (diez en total), mantuvo su letargo con el bate y la manilla. Errores a la defensiva y un relevo flojo lo condenaron ante un ‘team’ enérgico, enchufado y efectivo.
Solo en el último inning reaccionaron y estuvieron a punto de igualar, pero Gerson Jiménez bateó una línea directo a la manilla del torpedero y se produjo un doble play que apagó el incendio.
La pizarra se abrió en el segundo acto. Jorge Martínez anotó tras un imparable de Andy Vásquez que no fue bien manejado por la defensiva de Caimanes. Audy Ciriaco cometió un error lanzando para tratar de tomar a Vásquez en segunda, mientras Martínez pasaba por la antesala y luego pisaba el plato.
En medio de los lamentos por la equivocación del tercera base dominicano, Daniel Vellojín despachó un hit hacia el jardín izquierdo y puso a Vásquez en la caja registradora.
El abridor colombo-venezolano Jackson Solarte, que terminó acreditándose el triunfo, empleó 73 lanzamientos en cinco episodios completos y silenció la artillería de los saurios. La limitó a solo dos hits y ninguna carrera. Luis Morno cargó la derrota.
En el sexto episodio los Gigantes casi aumentan la cuenta, pero Jorge Martínez, con las bases llenas, bateó un roletazo y Caimanes redondeó un milagroso doble play.
No se pudieron salvar en la séptima entrada cuando el grandesligas de Gigantes, Jonathan Solano, diaparó un doble hacia el bosque izquierdo que puso a Andy Vásquez y Daniel Vellojin, embasados por ‘wild pitch’ y bases por bolas, respectivamente, en la caja registradora.
Ya con el marcador 4-0 y el campeón con la pólvora mojada, la suerte parecía echada. Pero se presentó una reacción en la agonía. Dilson Herrera conectó hit al jardín central y Francisco Acuña, que había recibido tiquete gratis del cerrador Ramón Morla y se había robado la segunda almohadilla, llegó al plato y descontó.
Un error del segunda base Bryant Flete en un roletazo de Ciriaco dejó a Herrera quieto en segunda y al dominicano en la inicial. Luego un elevado de Harold Ramírez al center field mareó al jardinero Leudys Báez y las bases se llenaron.
Los fanáticos reptiles, que estaban desanimados, revivieron y comenzaron a corear: '¡Sí se puede! ¡Sí se puede! ¡Sí se puede'. Mucho más después de que un imparable de Ramón Marcelino llevara a Herrera al ‘home’ y el tablero se pusiera 4-2. El rancho seguía ardiendo y no había out, pero Carlos Triunfel falló con un fly en el cuadro y posteriormente Gerson Jiménez despachó la línea que Erick Salcedo capturó para luego pisar segunda y sentenciar el juego con doble play. La tristeza fue de los Caimanes y la alegría y la emoción… ¡Gigantesca!