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'‘Mijo’, sal adelante y ayúdame', es la frase que Jesús Manuel, delantero de la Escuela Santo Tomás, recuerda de su madre Luz Mery González antes de partir de su municipio y entrar a una cancha de fútbol.

Todos lo conocen como Neymar. Nació el 6 de marzo de 2007, en una familia humilde y donde Luz Mery ha sido el bastión. En sus palabras, sinceras, y mientras mira el horizonte, describe cómo será su futuro.

'Mi deseo es llegar al fútbol y ser como Neymar. Quiero una casa en forma de balón, con piscina, con sala de cine, como la Neymar. Me gustaría jugar en cualquier equipo, lo importante es que me pongan a jugar', expresa Jesús, hincha del Barcelona y del Junior.

Es un delantero rápido, aprovecha su buen movimiento de cintura para eludir defensas como si dejara conos en el camino. Pese a que define bien, aún tiene cae en el temor cuando el arquero sale a achicarlo.

'A veces me da miedo definir porque me pongo ansioso y me da cosa que la gente vaya a decir que soy maleta o algo así (risas). Ya he aprendido un poco a mantener la calma', agrega el estudiante del colegio Camino Real.

Jesús es el menor entre tres hermanos y es obedece los consejos que recibe de su madre y de su padrastro José Díaz.

'Ellos me dicen que en la cancha haga las cosas bien, que me cuide, que no me deje lesionar y que no caiga en peleas. En la calle trato de alejarme de la gente cuando está fumando porque no quiero ir por el camino del mal', concluye el goleador tomasino con siete dianas.