Enviado especial*
Pereira está calurosa y teñida de amarillo. La pasión por la Selección Colombia se siente al llegar al estadio Hernán Ramírez Villegas, que luce impecable. Las camisetas amarillas bordean los alrededores del escenario en donde hoy la Selección Colombia Sub-23 comenzará a escribir su historia, con el deseo de alcanzar uno de los dos tiquetes a los Juegos Olímpicos de Tokio-2020.
El Torneo Preolímpico que se disputará en la ‘Perla del Otún’, Armenia y Bucaramanga (la segunda fase) es el centro de atención en el Eje Cafetero. Los pereiranos se volcaron a adquirir las boletas para apoyar a la Amarilla. Hasta ayer habían vendido 30 mil entradas, lo que presagia un gran espectáculo.
Colombia, dirigida por el samario Arturo Reyes, llega al campeonato bajo las dudas de los amistosos, en donde los resultados no fueron los mejores. La derrota 1-0 en el juego de preparación ante Bolivia, en el estadio Romelio Martínez de Barranquilla, dejó a más de un hincha preocupado, pero los jugadores y el cuerpo técnico están tranquilos y seguros que van a realizar un gran torneo, y lo que más anhelan es darle muchas alegrías al pueblo colombiano.
La Selección Colombia Sub-23, que no contará con sus mejores jugadores, como todas las selecciones, pues los equipos no los prestaron por no tratarse de un torneo Fifa, estará liderada por el cartagenero Jorge Carrascal, quien espera aportar toda esa experiencia que ha adquirido en el River Plate de Argentina, de la mano del técnico Marcelo Gallardo.
Otro de los llamados a figuras en esta Selección es Nicolás Benedetti. El mediocampista del América de México espera llevar las riendas de la Selección y ser el líder de un grupo de jóvenes que sueñan con Tokio.